“Estoy muy preocupada”, dijo la directora de la escuela donde un niño fue alcanzado por una bala
La directora de la Escuela Primaria Nº 51 “Felipe Gardell”
de Concordia, Viviana Abrigo, habló sobre la situación ocurrida este lunes por
la tarde, cuando un niño de 8 años fue alcanzado por una bala perdida. “Los
compañeros se la sacaron”, contó la docente en una entrevista radial. “Estoy
muy preocupada”, acotó la directora y adelantó que pedirá a la Policía que
asignen custodia en los horarios de entrada y salida de alumnos. La mujer
precisó que el disparo “impactó en el brazo del nene de 8 años, que asiste a
tercer grado”. “Le sangró un poco pero el nene no se cayó. Los mismos
compañeros le sacaron la bala que era de calibre 22”, reveló.
“Estoy muy preocupada”, admitió. Aclaró que, ayer por la
tarde pasadas las 14 cuando ocurrió el episodio de inseguridad, ella no estaba
en el establecimiento. “Yo ayer fui de mañana pero lo que me han relatado es
que fue una bala perdida que ingresó hacia el patio y no sabemos de dónde
vino”, contó.
Precisó que el disparo “impactó en el brazo del nene de 8
años, que asiste a tercer grado”. Luego fue al meollo de la cuestión en cuanto
a la salud del menor: “Le sangró un poco pero el nene no se cayó. Los mismos
compañeros le sacaron la bala que era de calibre 22”, reveló y admitió que se
quedó “helada cuando me contaron esto”.
Personal de la Policía de Entre Ríos y también de un
servicio de emergencias privado fueron hasta la escuela ubicada sobre calle
Moulins al 950 de Concordia. “La Policía estuvo bastante tiempo, más de una
hora, viendo de dónde pudo venir el tiro. Fue una bala que apareció de la
nada”, remarcó al programa Despertá con Nosotros (lunes a viernes de 7 a 9 de
www.oidmortalesradio.com.ar).
Abrigo informó que el niño está bien de salud. Contó que el
servicio de emergencias lo trasladó inmediatamente a un sanatorio de la ciudad
y después su papá lo llevó hasta el hospital “Delicia Concepción Masvernat”
donde le hicieron una radiografía.
Pedirán seguridad en horarios de entrada y salida
“Estamos preocupados”, reiteró luego y es comprensible al no
saber cómo evitar que suceda un episodio similar al de este lunes. “Mi
preocupación ahora es que yo voy a pedir que pongan un personal en la entrada y
a salida pero quién me asegura si no habrá otro tiroteo, otra balacera. Son
cuestiones que no lo puedo controlar”, reconoció.
Precisó que recurrirá a la Jefatura Departamental de Policía
para pedir presencia policial en los horarios de ingreso y egreso pero recordó,
lamentándose, lo que dijo que ocurrió hace 2 años: “Hubo un robo. Le robaron a
la directora de la secundaria número 27, que está pegada a la nuestra. Ante ese
suceso, nos reunimos con los padres e hice una nota a la Comisaría Cuarta. La
contestación fue que no había presupuesto para que haya un policía al ingreso y
egreso de los niños. Ante una contestación así, ¿qué podemos hacer nosotros?”,
planteó.
Lo que pasa afuera emerge dentro de la escuela
El Entre Ríos publicó este martes la entrevista e informó
sobre un contexto complejo, de violencia, inseguridad y carencias de todo tipo.
“No hemos tenidos otra situación compleja como pasó ayer. Un poco de violencia
de los padres, de algunos, no todos. Eso también es algo que nos preocupa”,
dijo la directora. Recordó un episodio similar que ocurrió la semana pasada:
“Al ingreso de los nenes de nivel inicial, se escucharon tiros y tuvimos que
hacer ingresar a los padres”.
“El fin de semana también hubo una balacera. Desde la
Asociación Cooperadora me contaron que se sintió una balacera”, recordó y
definió al Villa Jardín como “un barrio peligroso donde hasta ahora nunca pasó
un hecho como el de ayer”.
Mencionó, como otro dato vinculado al entorno de la escuela
que dirige, que se observan frecuentemente episodios de violencia. “Por
ejemplo, a los padres de nivel inicial se les pide certificado de buena salud,
control auditivo y de visión. Pasa el tiempo y no lo entregan así que uno se
los reclama y reacción digamos que no muy bien”, comentó.
Otro elemento destacado por la docente fue que “Lo que vemos
es familias desmembradas. Padres ausentes, madres que trabajan, llevan los
hijos a la escuela. Violencia de padres a madres. Los chicos van con esa
característica en la escuela. No todos, claro está. Automáticamente ves a un
niño y sabes si hay un problema en su casa”.
La situación económica de las familias que envían sus hijos
a la “Felipe Gardell”, dijo la directora, “se ha ido agravado. Un comedor
funciona acá compartido por primaria y secundaria y es impresionante la
cantidad de chicos que van al comedor. La situación económica es
impresionante”.
Destacó, finalmente, al personal. “Realmente el grupo de
docentes que tengo es excelente. Son muy comprometidas con la educación y con
la escuela. Las felicito porque estoy orgullosa con todas ellas”.
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