“Frigerio es un candidato natural en Entre Ríos”
Kneeteman está convencido que hay que “institucionalizar”
Cambiemos. Habló del poder de los medios nacionales, de la vitalidad del
radicalismo y sus intendentes en la campaña.
Sergio Kneeteman a partir del 10 de diciembre no tendrá un
cargo institucional. Termina su gestión como diputado provincial, pero seguirá
la política partidaria de cerca. Con despacho en Paraná. El colaborador de
máxima confianza de Atilio Benedetti fue uno de los responsables de la campaña
junto a Eduardo Caminal. Se jacta de haber dado vuelta el resultado en Entre
Ríos desde una perspectiva tradicional de la política, diferente a cómo lo
venía haciendo el PRO.
-¿Cómo sigue Cambiemos en Entre Ríos?
-Desde enero que estamos recorriendo la provincia. Me parece
que donde más mostramos Cambiemos nos fue mejor, lo que me indica que hay un
reclamo de la sociedad entrerriana de que este frente evolucione, por lo tanto
me parece fundamental la institucionalidad del espacio. Cuando el radicalismo
asume el rol protagónico que tiene que tener, sumado lo del PRO y su forma de
hacer política y campaña, se torna imparable. Como sucedió en las últimas
elecciones, donde la dimos vuelta contra todos los pronósticos. Me parece que
Cambiemos se tiene que fortalecer a partir de la institucionalidad.
-Frigerio es el jefe de la oposición y lo va a ser hasta el
10 diciembre. ¿Teniendo en cuenta los últimos movimientos que dan cuenta que el
ministro seguiría haciendo política en Entre Ríos, esto lo confirma como jefe?
-La sociedad lo percibió así y es lógico. Es un ministro
nacional y político que se relaciona con gobernadores, legisladores e
intendentes. Está claro que la valoración que se tiene sobre su rol lo hizo
jefe. También me parece que está claro que el radicalismo tiene mucho más para
aportar. Como decía recién, cuando asumimos un rol activo tornó potente a
Cambiemos con posibilidad de ser gobierno. El sostenimiento de Cambiemos se dio
básicamente con los intendentes, casi en su totalidad radicales, y al laburo
que hizo el radicalismo más allá de las críticas internas que se han hecho. De
todas maneras creo que Frigerio aportó muchísimo desde su función.
-¿Una candidatura de Frigerio en la provincia, tiene asidero
o es propia de la dinámica política?
-Uno que siempre ha andado en campañas, recorriendo y
trabajando para un candidato, sabe que el conocimiento es uno de los capitales
más difíciles de obtener. Y sobre todo en Entre Ríos, donde no tenés un sólo
canal o radio que llegue a todo el territorio. Lograr el nivel de conocimiento
es una inversión muy compleja, por eso una persona que tenga casi el 100 por
ciento de conocimiento como Frigerio por su rol de ministro y su aparición
permanente en los medios nacionales es un capital inigualable. Salir dos veces
en TN es igual a recorrer dos meses la provincia cable por cable. Ese
conocimiento lo tiene porque sin dudas es un dirigente importante a nivel
nacional. Obviamente más allá del trabajo que ha hecho, donde se ocupó de la
provincia. Ayudó mucho a los intendentes de todos los colores y al gobernador.
Nunca un ministro vino tantas veces a la provincia. Es un dirigente que
tranquilamente puede ganar una elección acá. Frigerio es un candidato natural
en Entre Ríos.
-¿Cambiemos, a mitad de gestión, constituyó un interbloque
en la Cámara de Diputados. Fue un error, un acierto y qué sería lo mejor para
el próximo proceso?
-En su momento yo plantee la inconveniencia de que se divida
el bloque, pero después finalmente lo resolvió el congreso partidario. De todas
maneras yo creo que después funcionó. Lo valoré después cuando encontré un
montón de ventajas, como por ejemplo el trabajo en el espacio de uno, con el
que concebís muchas cosas de la misma manera, para después confluir con tus
socios. Fue muy bueno. Incluso ya había resultado en el Congreso. Es más,
funcionamos mejor como interbloque que como bloque. Votamos lo mismo y a cada
votación se llegaba con un trabajo por separado para luego confluir. Gente del
PRO, que en su momento estaba en contra del interbloque, hoy está cómodo con
esta forma de trabajar.
-¿Qué no pudo incorporar la UCR a la agenda de un gobierno
nacional que se la califica de tener poca sensibilidad? ¿Pudo aportar algo de
esa agenda social que se había propuesto?
-Hubo un prejuicio muy grande de parte de la conducción
nacional que tenía el Gobierno de Ciudad de Buenos Aires y la provincia, es
decir los lugares institucionales más importantes del país, lo que hacía muy
difícil plantear cosas al PRO internamente o instalar una agenda. Con las
tarifas planteamos cuestiones que se tornaban difíciles de imponer. Ahora ese
problema también lo tuvo el radicalismo por sus propias limitaciones. Mario
Negri decía que teníamos que dejar de llorar por espacios y asumir un rol
protagónico. Esto pasó después del 11 de agosto y el resultado fue lo que fue.
A todas las recetas de campaña, como las de redes sociales, le agregamos la
idea de estar en la calle. Lo mejor de la política tradicional nos mejoró
muchísimo. Se esperaba que saquemos 33 puntos y sacamos más de 40. Nos decían
que la diferencia iba a ser de 20 y fue de 8. Me parece que está claro que la
UCR debe asumir el rol político y territorial.
-Volviendo a Negri, hace poco dijo que a Cambiemos hay que
hacerle un service. Qué service se le debería hacer en la provincia?
-Lo primero que tenemos que hacer es institucionalizarlo,
manteniendo las identidades.
-¿Pero por qué no pasó eso en los cuatro años?
-Porque hubo, me parece, una falta de compromiso del
radicalismo de asumir ese rol. Era más cómodo que venga Frigerio, que era el
que conocía y tenía elementos sobre lo que estaba pasando en la provincia, y
descansar en una conducción más nacional. Esto es una autocrítica, claramente.
Creo que debemos tener el rol que comenté antes.
-¿Qué debate se viene, aparte de las elecciones partidarias,
en la UCR?
-El año que viene se va a priorizar el interés del afiliado.
Que decida qué conducción quiere tener el radicalismo. La idea de seguir en
Cambiemos no se va a discutir, el próximo congreso va a ratificar la
pertenencia.
-¿Qué debate se viene, aparte de las elecciones partidarias,
en la UCR?
-El año que viene se va a priorizar el interés del afiliado.
Que decida qué conducción quiere tener el radicalismo. La idea de seguir en
Cambiemos no se va a discutir, el próximo congreso va a ratificar la
pertenencia.
-¿Por qué en las elecciones provinciales se perdió por mucho
y hace un par de semanas se ganó por nada?
-En Entre Ríos nació Cambiemos, en marzo de 2015, por eso
esta provincia tiene una valoración importante sobre este frente y su historia.
Por otro lado esta provincia se resiste a estar ligada al kirchnerismo. Acá hay
un componente social que no tiene nada que ver con Cristina Kirchner y a Bordet
el entrerriano no lo ve como un kirchnerista tradicional o típico. Se evaluaron
gestiones.
Fuente: Página Política
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