Vitor: “Seguimos sin plan en la provincia y el Presupuesto es un relato”
El diputado de Cambiemos fue crítico respecto al proyecto de Ley de Presupuesto provincial, al exponer falencias en el manejo de los recursos, discrecionalidad y delegación de poderes de la Legislatura al Ejecutivo. También enfatizó en la subejecución del presupuesto de Obra Pública.
En su intervención durante la Sesión de tratamiento del Presupuesto 2021, el diputado provincial, Esteban Vitor, indicó que el gobierno "pretende que se aprueben las proyecciones dibujadas de ingresos y gastos y la cesión de facultades de este Cuerpo al Poder Ejecutivo, sin posibilidades de discusión" y consideró que “al no existir un plan estratégico que acompañe al presupuesto solo se fomenta el aumento del gasto público, incrementando la discrecionalidad en la asignación de recursos dejando de lado los principios de eficiencia y eficacia".
Afirmó que las proyecciones respecto a inflación en las que se basa el proyecto de presupuesto son irreales y ello determina que se recaude más de lo presupuestado, “quedando una enorme cantidad de dinero fuera del presupuesto para poder usarla discrecionalmente y sin la participación de la Legislatura".
Seguidamente criticó duramente al ministro de Economía, Hugo Ballay indicando que pareciera que “aún no sabe estimar correctamente las partidas claves del presupuesto" porque hay una constante de subejecución del presupuesto, fundamentalmente en obra pública, en los últimos 6 años", remarcó.
Asimismo, puntualizó que en ese período en Entre Ríos "solo se ejecutó la mitad del presupuesto de obra pública y perdió en los últimos cinco años más de 6200 puestos de trabajo registrados como consecuencia de la falta de inversión en infraestructura. “Ni siquiera se están realizando las inversiones mínimas para mantener la infraestructura actual y eso está a la vista de cualquiera".
Un capítulo especial le destinó a la inversión en Salud. Sobre el tema Vitor, expresó que "Bordet celebraba a principios de este año el “plan de infraestructura sanitaria” pero la desinversión en salud es muy marcada. En el año 2013 la provincia solo invirtió en salud 760 pesos anuales por cada entrerriano, el año pasado 362 pesos y este año terminará en 275 pesos. Lo que es una vergüenza”
El diputado Vitor fundamentó que “todos los pesos que no se invirtieron en obra pública fueron a compensar el creciente déficit de la Caja de Jubilaciones” y le pidió al gobierno "que se hagan cargo de haber generado una caja jubilatoria explosiva, que se come los recursos de la provincia” según las estimaciones expresadas, para 2021 se estima un déficit de casi 20.000 millones de pesos. Entre Ríos es la 2° provincia con mayor déficit previsional con una “situación que se ha venido agravando año tras año y sobre la cual el Gobernador no ha hecho nada al respecto”
Una consideración especial mereció el tema de la deuda pública provincial la cual, según la estimación del presupuesto 2021, se incrementará 23 mil millones de pesos consolidando un stock de deuda superior a los 92 mil millones de pesos a fines de 2021. “Nosotros no vamos a hacer populismo con la deuda. Somos plenamente conscientes de que la deuda no es la causa de los problemas, sino solo una consecuencia de un déficit persistente, afirmó el Diputado de Cambiemos.
Seguidamente instó al gobierno a honrar los compromisos de deuda asumidos, al referirse al incumplimiento de la provincia de un pago de 22 millones de dólares de intereses de la deuda, que derivaron en un proceso de reestructuración, rechazada por los acreedores. “No conocemos qué destino tendrá esa negociación, pero sí podemos afirmar que la deuda pública crece más rápido que los ingresos netos disponibles” afirmó el Diputado y seguidamente agregó que esta situación deja poco margen para las obras públicas y “sin infraestructura y con una alta presión tributaria, la inversión privada que genera empleo, no crece y la provincia se condena a seguir aumentando los niveles de pobreza que se observan en los últimos relevamientos” Sentenció.
El legislador habló de la delegación de poderes que se pretenden aprobar el Proyecto: "¿Qué sentido tiene aprobar una ley de presupuesto si en el mismo articulado le permitimos al Poder Ejecutivo que pueda ampliar el Presupuesto de Gastos, el Cálculo de Recursos o las Fuentes Financieras?” se preguntó. Y agregó que esta práctica presupuestaria solo aumenta el margen de discrecionalidad del Gobernador para la asignación de recursos suprimiendo el trámite ante esta Legislatura.
Finalmente, el diputado Vitor concluyó afirmando que “Mientras sigamos tratando proyectos de presupuesto que carezcan de rigor técnico y que no incluyan en su formulación y debate a los distintos actores, lejos estaremos de planificar la provincia que merecen todos los entrerrianos”.
TEXTO COMPLETO DE LA EXPOSICIÓN DEL DIPUTADO VITOR, ENVIADO A 7PAGINAS.
Señor presidente,
En teoría, el presupuesto público es la herramienta más
importante para el manejo del Estado, es un instrumento que permite la
conducción estratégica de los fondos públicos especificando de dónde provienen
sus recursos y cómo se distribuyen para satisfacer las necesidades de los
entrerrianos. El presupuesto es la expresión financiera de un plan. Un plan,
señor presidente, que hace muchos años no se expresa en el debate del
Presupuesto público de la provincia de Entre Ríos.
Hace muchos años que el debate sobre el presupuesto en esta
Legislatura se basa en un mero trámite parlamentario en el que el Ejecutivo
pretende que se aprueben las proyecciones dibujadas de ingresos y gastos y la
cesión de facultades de este Cuerpo al Poder Ejecutivo, sin posibilidades de
discusión. La verdad es que eso no refleja el espíritu dialoguista que
pregonaba el Señor Gobernador en sus discursos. Aún estamos esperando que nos convoque
al diálogo, pero a un diálogo franco, para planificar en serio esta provincia,
más allá de las gestiones de gobierno, promoviendo políticas de Estado basadas
en acuerdos sustentables en el tiempo.
Y ¿sabe por qué digo esto, señor Presidente? Porque cuando
el presupuesto no tiene vinculación con un plan estratégico, se fomentan
prácticas que tienen a aumentar el gasto público, incrementando el margen de
discrecionalidad en la asignación de recursos, dejando de lado los principios
de eficiencia y eficacia que deben regir toda ejecución presupuestaria.
Voy a referirme ahora a algunos temas relevantes sobre este
Proyecto de Presupuesto 2021 que hemos analizado extensamente con nuestro
equipo.
En primer lugar, quiero señalar con preocupación los
supuestos insostenibles en los que se basa la formulación este proyecto de
Presupuesto 2021, fundamentalmente en relación a una tasa de inflación
proyectada del 29%. Dada la combinación de políticas fiscales y monetarias que
está llevando a cabo el gobierno nacional es absolutamente irreal esperar una
reducción de la tasa de inflación de esta magnitud. ¿Y por qué es tan
importante la variable inflacionaria? Porque impacta de manera directa sobre la
recaudación nominal. Esta situación conlleva a una subestimación tanto de los
recursos provinciales propios como de los coparticipados por Nación, que afecta
directamente la ejecución del presupuesto ya que la diferencia entre lo
presupuestado y lo que efectivamente se recaude el próximo año, que será mayor,
no tiene asignación específica y por lo tanto favorece la administración
discrecional de los fondos. Al mismo tiempo, según las proyecciones oficiales
los recursos tributarios provinciales crecerían solo 30% como consecuencia de
la rebaja de alícuotas de IIBB durante el año que viene, en el marco del
Consenso Fiscal suspendido a fines del año pasado. Mientras todos sabemos que
en pocas semanas se avanzará en la firma de una nueva modificación del Consenso
para no solo volver a suspender la rebaja por un año más, sino también para
permitirles a la provincias incrementar alícuotas que habían sido reducidas.
Entonces, la verdad, es que nos traen una cosa a la Cámara como para
entretenernos y la realidad pasa por otro lado.
Con respecto a los gastos. Parecería que, luego de tantos
años de administrar las finanzas de la Provincia, el señor Ministro de Economía
aún no sabe estimar correctamente las partidas claves del presupuesto. Si
analizamos la relación entre lo presupuestado y ejecutado, advertimos que en
los últimos 6 años el gasto en personal fue, en promedio, un 20% mayor en la
ejecución que en el presupuesto. Y se destinó en promedio un 40% más al pago de
jubilaciones y pensiones que lo que sale en la letra de los Presupuestos. ¿Cómo
es posible que haya un error tan grande en las estimaciones? ¿Y cómo es posible
que este Presupuesto 2021 estime un crecimiento del gasto en personal de
aproximadamente 18% y de las jubilaciones de apenas el 6,5%? Si las dinámicas
de los salarios de los activos y las prestaciones de los pasivos están
íntimamente relacionadas. Este presupuesto no cierra por ningún lado.
Mucho más preocupante es lo que encontramos al analizar las
partidas destinadas a Inversión Pública. Fíjese, Sr. Presidente, en la Asamblea
Legislativa de este año el Sr. Gobernador, se jactaba de la prioridad de la
obra pública en su gestión y lo cito “desde el inicio de la gestión pusimos
como eje llevar obras públicas esenciales a cada rincón de la provincia, con
una mirada integradora, que permitiera reducir las asimetrías territoriales y
brindar a la comunidad la infraestructura básica necesaria para apuntalar su
desarrollo territorial y humano, fortaleciendo las potencialidades de cada una
de nuestras ciudades y pueblos”. Claramente está analizando la realidad de otra
provincia, porque aquí en Entre Ríos, en los últimos 6 años, solo se ejecutó la
mitad del presupuesto de obra pública y si analizamos los datos del 2020, la
proyección indica que apenas se ejecutará un 36% de lo presupuestado. O sea que
lo que vemos es que sistemáticamente se presupuestan gastos corrientes que
después terminan siendo mucho más altos y gastos de capital que después
terminan siendo mucho más bajos. Esto ya es un patrón de comportamiento en la
administración de las finanzas entrerrianas.
Uno podría pensar que es común que los Estados provinciales
sub ejecuten las partidas destinadas a obra pública en similares magnitudes,
pero analizando comparativamente los presupuestos de algunos vecinos,
advertimos que en Santa Fe la sub ejecución alcanza apenas el 19% y en Córdoba
pasa lo contrario se invierte casi un 20% por encima de lo presupuestado.
Nuevamente queda expuesta la falacia discursiva de este gobierno sobre asuntos
medulares para el desarrollo de la provincia. ¿Cuánto invierte Entre Ríos en relación
al resto de las provincias del país? La mitad, exactamente la mitad. El
promedio de las provincias argentinas destinaron entre los años 2016-2019, el
12% de sus gastos totales a los gastos de capital, mientras que Entre Ríos sólo
destinó el 6,4% en promedio, ratio que baja hasta un récord histórico de solo
3% para el año 2020.
Esta desinversión en obra pública tiene un correlato directo
en el desempleo. Un informe recientemente publicado de la Cámara Argentina de
la Construcción - Delegación Entre Ríos, señala que en los últimos 5 años se
perdieron en Entre Ríos más de 6200 puestos de trabajo registrados como
consecuencia de la falta de inversión en infraestructura. El informe desagrega
los datos de Obra Pública en Entre Ríos y desnuda otra verdad oculta en el
discurso del gobierno al señalar que más del 70% del gasto en obra pública se
destina a reparación, mantenimiento, ampliación o remodelación de obras
preexistentes. Entonces, si consideramos que el grueso de la obra que se
ejecuta es para reparación y mantenimiento de obras preexistentes y que éstas
en general han sufrido una baja de la quinta parte de lo que se ejecutaba al
principio de la década, es posible asegurar que la provincia ni siquiera está
realizando las inversiones mínimas requeridas para mantener la infraestructura
actual. A la vista de cualquiera está el deterioro de las obras existentes,
basta considerar el estado de los caminos rurales, rutas provinciales,
escuelas, hospitales...
El Sr. Gobernador también celebraba a principios de este año
el “plan de infraestructura sanitaria” que procuraba garantizar a cada vecino
entrerriano la posibilidad de acceder fácilmente a un sistema de salud digno,
sin embargo, la desinversión en salud aparece nuevamente como una constante en
los últimos gobiernos. A plata de hoy, en el año 2013 la provincia solo
invirtió en salud 760 pesos anuales por cada entrerriano. Pero si esta cifra
puede parecer chica, pensemos que el año pasado invirtió solo 362 pesos y este
año terminará con una inversión per cápita de aproximadamente 275 pesos. Con
dicha inversión y los antecedentes de desinversión lejos estarán de alcanzar la
meta presupuestada para el 2021.
Todos los pesos que no se invirtieron en obra pública,
fueron destinados a compensar el creciente déficit de la Caja de Jubilaciones
de Entre Ríos, cuyo déficit para 2021 se estima en casi 20.000 millones de
pesos, representando un 7,6% del total de los recursos. Entre Ríos, luego de
Santa Cruz, es la 2° provincia con mayor déficit previsional entre las provincias
que no han transferido sus Cajas a la nación y mirando la serie histórica se
observa que es una situación que se ha venido agravando año tras año teniendo
“un peso cada vez mayor en la estructura de gastos”, tal como indica el Mensaje
del Proyecto de Presupuesto 2021.
Y sobre esto, ¿qué se ha hecho Sr. presidente, que se ha
hecho...? Nada, absolutamente nada. Año tras año se miran con preocupación
estos números, se comenta la necesidad
de realizar cambios, pero nunca se convocó efectivamente al
diálogo, sino que, nuevamente, el relato político del Sr. Gobernador transformó
este tema en una cortina de humo, cuando anunció una convocatoria a todos los
sectores para debatir sobre el sistema previsional entrerriano a principios de
este año. Todavía estamos esperando. La provincia está gobernada hace 17 años
por el mismo partido. Les pedimos por favor que se hagan cargo de haber
generado una caja jubilatoria explosiva, que se come los recursos de todos los
contribuyentes de la provincia. En la oposición encontrarán siempre la
predisposición a colaborar democráticamente. Jamás nos verán con toneladas de
piedras afuera de la Cámara para impedir una sesión que plantee reformas.
Una consideración especial merece el tema de la deuda
pública provincial la cual, según la estimación del presupuesto 2021, se
incrementará 23 mil millones de pesos consolidando un stock de deuda superior a
los 92 mil millones de pesos a fines de 2021. Según un informe publicado por el
Consejo Empresario de Entre Ríos “la deuda provincial en junio de 2020 ascendió
a 64.000 millones de pesos, lo que equivale a 24 meses de ingresos tributarios
provinciales. De esta deuda, 26.000 millones (40%) es con el Estado nacional,
35.000 millones (55%) son títulos públicos y 3.000 millones (5%) es con bancos
privados”
En los últimos años, la provincia ha cambiado su perfil de
endeudamiento prefiriendo los títulos públicos en dólares por sobre otras
fuentes de financiamiento, aprovechando la reapertura que había logrado la
Nación a los mercados de capitales, que ahora vuelven a estar cerrados y
probablemente por mucho tiempo. Nosotros no vamos a hacer populismo con la
deuda. Somos plenamente conscientes de que la deuda no es la causa de los
problemas, sino solo una consecuencia de un déficit persistente.
Sin embargo, sabemos que cuando un Estado toma crédito, está
poniendo en juego su reputación. Y no es gratuito para el presente ni para el
futuro inclumplir los compromisos asumidos. En este contexto, la provincia
incumplió con un pago de intereses de 22 millones de dólares el pasado mes de
agosto y debió iniciar un proceso de reestructuración de deuda con sus
acreedores, que fue rechazado por el 45% de los tenedores de la misma. No conocemos
qué destino tendrá esa negociación, pero sí podemos afirmar que la deuda
pública crece más rápido que los ingresos netos disponibles. Esto quiere decir
que luego del pago de sueldos y jubilaciones y de realizadas las transferencias
a los municipios y comunas, no quedan ingresos suficientes para cumplir con las
deudas, por ello el gobierno reduce la inversión en obra pública y aumenta los
impuestos.
Esta situación es insostenible en el mediano plazo. Sin
infraestructura y con una alta presión tributaria, la inversión privada que
genera empleo, no crece y la provincia se condena a seguir aumentando los
niveles de pobreza que se observan en los últimos relevamientos del INDEC
Antes de concluir, Sr. Presidente, quisiera referirme
brevemente a la delegación de facultades de este Cuerpo Legislativo al Poder
Ejecutivo, que nuevamente se pretenden establecer en este proyecto de
Presupuesto 2021. Este instituto, excepcional y atípico, surgido como
consecuencia de la creciente complejidad que adquirieron las funciones del
Estado, se ha convertido en una regla para este gobierno y pone en evidencia
que al Sr. Gobernador le interesa muy poco la división de poderes. Yo me
pregunto, ¿Qué sentido tiene aprobar una ley de presupuesto si en el mismo
articulado le permitimos al Poder
Ejecutivo que pueda ampliar el Presupuesto de Gastos, el
Cálculo de Recursos o las Fuentes Financieras?
Como decía al principio, el artilugio es subestimar los
ingresos en el presupuesto, atendiendo a los índices reflejados en el texto del
proyecto. Claramente los ingresos van a ser mayores, y esa diferencia quedará
bajo la discrecionalidad del Poder Ejecutivo, con un simple compromiso de
“comunicar” a la legislatura. Cuando en realidad es esta legislatura quien debe
llevar el control de la ejecución presupuestaria y por ello no podemos
acompañar estos artículos que delegan facultades que son propias de esta
Legislatura.
Para concluir, Sr. Presidente, quiero recordar la
importancia de la necesaria articulación entre el presupuesto y la planificación.
Esta articulación debería surgir como producto de un proceso de interacción
política y técnica, que atienda los aspectos coyunturales con las acciones de
largo plazo. Mientras sigamos tratando proyectos de presupuesto que carezcan de
rigor técnico y que no incluyan en su formulación y debate a los distintos
actores, lejos estaremos de planificar la provincia que merecen todos los
entrerrianos.
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