Confían que Entre Ríos responde a las demandas de los turistas
Numerosa y variada es la grilla de fiestas populares que, especialmente en verano, ofrece Entre Ríos. En el marco de la pandemia se han ido cancelando debido a las exigencias sanitarias que plantea el contexto. No obstante, confían que la actividad turística se posicione a partir de las fortalezas de la provincia para responder a las renovadas demandas de los turistas.
La semana pasada aportó la novedad que en Entre Ríos, el
Carnaval del País no tendrá edición 2021. La decisión de los clubes que lo
organizan fue cancelar esta megafiesta a raíz de la situación sanitaria. Los
organizadores de la que se considera la mayor fiesta a cielo abierto del país
tomaron la determinación teniendo en cuenta el cuidado de la salud y seguridad
de los espectadores.
Igual determinación ya había tomado la organización del
Festival Nacional de Jineteada y Folclore que se realiza en Diamante, mientras
que Concepción del Uruguay hace tiempo desistió de organizar una fiesta
presencial de la Playa, y en ese camino se orienta también la Fiesta de la
Artesanía en Colón y la lista podría seguir porque Entre Ríos es fecunda en
convocatorias declaradas provinciales y nacionales que se realizan en temporada
estival, aportando atractivos particulares a la agenda turística.
El secretario de Turismo de la provincia, Gastón Irazusta,
aclaró a EL DIARIO que no hay una bajada de línea desde el Gobierno provincial
orientando a la suspensión generalizada, lo que ocurre “es que hoy no están
dadas las condiciones” desde el punto de vista sanitario.
Taxativamente no brindó un detalle de lo que ocurre en cada
caso por “respeto a las autonomías municipales”. Respondió que “en primera
instancia hay que escuchar a los organizadores en concordancia con los
municipios que, en función de la situación en la que se encuentran en cada
lugar, evalúan alternativas”. Llegado el caso, obviamente también cuenta la
mirada del Comité de Organización de Emergencia de Salud (COES) a nivel local o
provincial. Así, se trata de “un análisis caso por caso”, aunque a esta altura
del año, “la mayoría ya se ha suspendido o se ha reprogramado. Algunas han
encontrado un híbrido o bien se hicieron con formato digital”. La Fiesta del
Asado con Cuero, en Viale, por citar un ejemplo, se hizo con una presencialidad
limitada, con protocolo en acuerdo con el municipio local y virtualmente hubo
presentación de números folclóricos.
El funcionario insistió con que “hoy no están dadas las
condiciones por el contexto de pandemia donde lo que se quiere evitar en
primera instancia es la aglomeración de personas y tal como tenemos
históricamente previstas las fiestas populares, es justamente eso lo que
ocurre”. No obstante, como una nota característica de esta pandemia es que
plantea un “escenario de bastante imprevisibilidad para los próximos meses”, el
funcionario explicó que “están atentos al surgimiento de alternativas”.
Otro aspecto que cuenta en estas decisiones es el tiempo que insume la organización. Es el caso reciente de Gualeguaychú, donde ya se tomó la decisión “si bien empieza formalmente el segundo fin de semana de enero, o sea que falta un mes”. Insistió que desde el Gobierno provincial “somos muy respetuosos de las miradas locales”.
La Fiesta del Asado con Cuero, en Viale, se hizo con una presencialidad limitada y contó con la visita del gobernador Bordet.
ALTERNATIVAS
Anunciada la suspensión de un acontecimiento de nivel provincial o nacional, rápidamente se piensa en los recursos económicos que dejarán de ingresar. Planteada la inquietud periodística en ese sentido, Irazusta analizó que “las fiestas populares son un motivo de orgullo y un gran complemento en materia turística, pero lo que sucede es que se ha hecho un trabajo muy fuerte para tener un abanico de propuestas”.
“Es una temporada atípica, en convivencia con el Covid, lo que limita e impide tener la imagen de lo que ocurrió en la última temporada de verano. Pone otras reglas de juego, exige un poder de adaptación muy fuerte y en ese contexto, tenemos todos los atractivos turísticos de la provincia en condiciones adaptadas a esta realidad”, afirmó a EL DIARIO.
Aludió a los “grandes atractivos de la provincia” en la que “las fiestas populares son un atractivo en sí mismo y las que más se recienten en este contexto. Pero es difícil –admitió– evaluar de qué manera se va a manejar el turismo, los podremos ir analizando con el correr de los días. Lamentó “no tener la fiestas populares como estamos acostumbrados, pero Entre Ríos en este mismo contexto, desde el punto de vista turístico, se planta desde otro lugar muy fuerte, en cuanto al perfil de turismo que se desarrolla en este contexto, asociado a los espacios naturales, a los grandes espacios abiertos, de cercanía, características en la que nuestra provincia es muy fuerte. Tiene mucho atractivo asociado a todo esto”, subrayó.
Una señal en esa dirección fue el fin de semana pasado, largo, inicio de la temporada, donde Entre Ríos se posicionó en el tercer lugar en el país en cuanto al movimiento turístico, es decir que “en otros volúmenes en relación con otros años, estamos igualmente muy bien posicionados”, ponderó el funcionario.
Adelantó que “en los próximos días vamos a reforzar la difusión de la variedad que tiene nuestra provincia en relación con lo que demandan mucho los turistas: recursos naturales enmarcados en grandes espacios abiertos, todos muy requeridos en este momento en los que la provincia se posiciona muy bien”, reiteró.
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