Dictamen sobre aborto: Kueider firmó en disidencia y Olalla no firmó

Son dos los senadores entrerrianos que integran alguna de las tres comisiones en las que se debatió el proyecto sobre la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Edgardo Kueider firmó en disidencia, pero hay dudas sobre su voto en el caso de que no se acepten los cambios que propone. La radical Stella Olalla no firmó, lo cual no implica que necesariamente vote en contra. El final está abierto

 

El proyecto de ley que prevé la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo obtuvo este jueves dictamen de mayoría tras finalizar el último plenario de comisiones del Senado, en el que los senadores escucharon durante tres días a 60 expositores a favor y en contra de la propuesta del Poder Ejecutivo.

 

El texto fue pasado a la firma y obtuvo en la noche del jueves 23 firmas a favor, dos de ellas con disidencias, las de los senadores Ernesto Martínez (Cambiemos) y la del entrerriano Edgardo Kueider (Frente de Todos).

 

También firmó a favor la patagónica Silvina García Larraburu, que en 2018 había votado en contra de la propuesta de legalizar el aborto.

 

Entre los firmantes están Norma Durango, Oscar Parrilli, Anabel Fernández Sagasti, Guadalupe Tagliaferri, Alfredo Luenzo, Ana Almirón, Daniel Lovera, Mariano Recalde, María Eugenia Catalfamo, Juan Pais, Eugenia Duré, Gladys González, Nancy González, Ana Ianni, María Pilatti, María Sacnún, Silvia Sapag, Pamela Verasay, Beatriz Mirkin y Nora Giménez.

 

De los tres senadores nacionales que aporta Entre Ríos al Parlamento es sabido que Alfredo De Ángeli (PRO) votará en contra, como lo hizo en el 2018. Los otros dos legisladores son el peronista Edgardo Kueider y la radical Stella Olalla y sobre ellos y un puñado más está puesto el foco de atención, ya que sus posturas terminarán inclinando la balanza para un lado o para el otro.

 

Kueider firmó a favor, pero en disidencia porque pretende que se introduzcan modificaciones en algunos de los artículos. Hay dudas sobre lo que hará en el caso de que no se acepten sus sugerencias. En tanto Stella Olalla no firmó el dictamen, lo cual no implica que necesariamente vaya a votar en contra, por lo que si decide mantener silencio en relación a su postura, recién en la sesión del 29 se conocerá la orientación de su voto.

 

Así las cosas el final está abierto, hay un virtual empate técnico y recién el 30 a la madrugada se sabrá si el país contará con una ley que posibilita la práctica del aborto.

 

Varios son los caminos posibles para que la ley salga. El primero es conseguir votos a favor del proyecto sin necesidad de cambios lo que permitiría sancionar la ley el martes 29. El segundo escenario es aceptar algunas modificaciones y volver a enviar el proyecto a Diputados para que esa cámara dé su aval, publicó InfoBae. El tercero es complejo pero ya se conversa: un compromiso del Poder Ejecutivo para hacer los ajustes al momento de la reglamentación lo que agilizaría la sanción de la ley.