Lo que dejó la visita del presidente


A modo de cierre del año político, el presidente de la Nación visitó la ciudad de Concordia para la apertura de la licitación de una obra largamente espera que se espera signifique un cambio en la economía de la región, la construcción del nuevo aeropuerto internacional de cargas. Después de lo sucedido este martes, seguramente pase muy poco en lo que refiere a actividad política en la ciudad en lo que resta del año, menos de diez días. La visita del primer mandatario nacional dejó varias apostillas, que aquí contaremos.

Una hora habrá sido el tiempo total de permanencia de Alberto Fernández en Concordia, desde que bajó del avión, estuvo reunido con el Gobernador y algunos pocos dirigentes más, luego realizó el acto en el que sólo hubo tres oradores, el intendente Alfredo Francolini, el gobernador Gustavo Bordet y el propio Presidente cerrando la actividad oficial para dar inicio al propio proceso de la apertura de las ofertas de la licitación que se habían presentado.


Se realizó un doble cerrojo no pudiendo ingresar al Parque Liquidambar nadie que no fuese "periodista" o "político". Desde allí había que emprender una larga caminata hasta la entrada al aeropuerto. Allí, otro control y filtro. No todos podían pasar. Por protocolo, decían. La prensa pudo trabajar bien, aunque no hubo declaraciones ni contacto de Fernández con los periodistas, y es lo que la mayoría fuimos a buscar, la palabra del Presidente.

LAS NEGOCIACIONES CON LIMA

Llamó la curiosidad y despertó las miradas cruzadas entre varios de los presentes, una parte del discurso del Gobernador Bordet. "Cuando le manifesté esta idea (a Andrés Lima), no dudó un minuto en apoyarnos y llevarlo adelante", dijo el primer mandatario provincial.


Quienes seguimos las coberturas periodísticas de los últimos años, recordamos las interminables reuniones de Cresto y Lima, de los Rotary Club de Concordia y de Salto, las gestiones de Cresto y Lima con la CARU y con CTM cuando estaban en mano de en un signo político distinto al actual, y no estuvo presente el Gobernador en esas declaraciones. Lo redujo a un diálogo entre él y el Intendente de Salto.

En el palco de prensa hubo comentarios por lo bajo. Alguno se animó a insinuar frases exageradas como "¿se quedó con el mandado?", frase demasiado exagerada sin dudas. Pero la disputa electoral del 2023 pareció estar presente en este acto institucional.

EL HIJO DEL PRESI Y EL PERIODISTA DE CONCORDIA

La foto menos pensada, que no fue. "Me convidás un pucho", parece que le dijo. Y el periodista, Exequiel Bond, de Info Litoral le convidó un cigarrillo. La escena ocurría en la previa del discurso del Presidente. ¿Quién era el que pedía un cigarrillo? Según el periodista, el propio hijo del Presidente, Estanislao, que bajó del avión y se entremezcló entre los periodistas.

Mientras muchos buscaban una foto con el Presidente, un periodista de Concordia y sin buscarlo, pudo tener un una foto con el hijo del Presidente. Pero "estaba ahí, sencillo. Ni sabía que era el hijo del presidente. Se sentó al lado mío, me pidió un pucho. Le di fuego y cuando me di cuenta estaba lejos", comentó Bond. Aunque no hay foto que registre el momento.

LA LLAVE DE LA CIUDAD Y EL AJEDREZ

El intendente Alfredo Francolini le hizo entrega de tres obsequios al Presidente. La declaración de Huésped de Honor, la Llave de la Ciudad, que es habitual que se entregue en estos casos, y un Ajedrez realizado de forma artesanal por artesanos locales. Una obra donde cada una de las figuras del juego están talladas en madera, de gran calidad.

Sin dudas el regalo tiene un simbolismo muy importante. El ajedrez es considerado el "deporte ciencia" y se suele hacer referencia a la importancia para desarrollar estrategias que tiene este juego. Se suele titular en los medios con frases como "el enroque de funcionarios" cuando se cambian dirigentes de una función a otra, y es una acción propia de este juego.

Sin dudas, un regalo simbólico.

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