"Puede sufrir vejaciones": Ex juez alertó a la Cámara de Casación Concordia que mandó a la cárcel a Rivas
Eduardo García Jurado, ex juez de Gualeguaychú, no compartió la decisión de la Casación Penal de Concordia de enviar a la cárcel al condenado por corrupción de menores. Además, alertó de posibles torturas.
La Cámara de Casación
Penal de Concordia revocó la prisión domiciliaria otorgada al condenado abogado
Gustavo Rivas, quien debe cumplir con una pena de 23 años por corrupción de
menores y promoción de prostitución. El sentenciado fue derivado a la cárcel de
Gualeguaychú, por lo que ahora un juez jubilado, alertó que el hombre de 77
años puede sufrir vejaciones y torturas en el penal.
García Jurado explicó
que la ley determina la posibilidad de que las personas mayores de 70 años
accedan al beneficio de la prisión domiciliaria por cuestiones humanitarias y
de salud. Es decir, que no es algo automático que una persona mayor se vea exenta
de cumplir la pena en una prisión común, como es del caso de Rivas.
Sin embargo, el ex
magistrado expresó: “Las cárceles están llenas de jóvenes, y son casi
ingobernables en su régimen interno. Se intenta cumplir, pero el ambiente no
ayuda, porque, en las cárceles, el poder interno está racionalmente dividido
entre el poder penitenciario y los lideres presidiarios, que no tienen 70 años.
Sino que son jóvenes y tienen fuerza física, y una cabeza en condiciones”.
“Llevar a arresto a
una persona de 77 años de edad, y con una condena de delitos sexuales, lo lleva
a un alto riesgo de sufrir torturas y vejaciones. Es muy peligrosa la decisión.
Yo entiendo la actitud de Beherán, pero acá la responsabilidad cae en la Sala
de Casación muy nueva de Concordia”, reflexionó.
En este sentido,
García Jurado explica que “aparentemente no hay ninguna enfermedad manifiesta
en Gustavo Rivas, pero las personas de 70 ya tienen una debilidad física
importante”.
“Yo espero que no pase
nada, que no volvamos a tres mil años atrás, donde la venganza privada era la
regla. La condena debe ser racional y medida. Y yo entiendo que la cárcel para
este condenado es un exceso que puede acarrear de forma inmediata las
vejaciones, las torturas. El peso de lo que pase va a caer sobre estos jueces”.
Al respecto, el ex
magistrado señala que la interpretación de la ley ha rondado los límites y
destaca que “esto es peligroso, porque sienta un precedente para el sistema
judicial que es contraproducente. De hecho, se ha visto en las manifestaciones
en las redes sociales en el caso de los rugbiers, que la gente pedía no solo
perpetua sino que les tocara la peor cárcel”.
“El arresto
domiciliario, con un control mínimo, significa para este hombre no agregarle
una condena más a la que ya ha tenido”, publicó Máxima Online.
No hay comentarios.