Preocupación: Otra agresión en el futbol de la liga de Chajari enciende las alarmas

Los violentos manchan la pelota.

La violencia en el fútbol de la Liga de Chajarí ha vuelto a encender las alarmas en la región, generando preocupación y cuestionamientos. Un nuevo hecho de violencia se produce apenas días después del impactante incidente en el que un jugador de Villa del Rosario, Martín Wallingre, sufrió una brutal agresión que resultó en una cirugía para extirparle un testículo. (Ver mas en Después de la cirugía: “Me reventó un testículo de una trompada”, dijo el jugador de Villa del Rosario)

El último episodio de violencia tuvo lugar este domingo cuando un jugador de Ferro propinó un fuerte golpe en el rostro a un jugador de Vélez, causándole una herida que requirió cinco puntos en el labio superior y le aflojó dos de sus dientes. Estos hechos lamentables han generado una gran preocupación en la comunidad deportiva y han despertado el debate sobre el comportamiento dentro de las canchas de fútbol.

Los dirigentes deportivos de la ciudad de Amigos están esperando duras sanciones por parte de las autoridades de la Liga de Chajarí para frenar esta ola de violencia en las canchas locales y la zona donde se disputa este torneo. La gravedad de las agresiones y sus consecuencias médicas exigen una respuesta firme para garantizar la seguridad de los jugadores y el ambiente deportivo en la liga.

En relación al primer caso de agresión que involucró a Martín Wallingre, se ha informado que el jugador de Santa Ana, Alexander Lalo Lencina, ha sido suspendido temporalmente por una fecha mientras el tribunal de penas recopila evidencia adicional. Las autoridades han indicado que tomarán medidas adicionales de oficio en función de las pruebas presentadas.

Además de los incidentes en el campo de juego, 7Paginas supo que la hinchada de Villa del Rosario colgó una bandera con el mensaje "Lencina cobarde" en referencia al jugador de Santa Ana que agredió a Wallingre. Aunque la bandera fue retirada, este acto refleja el clima de turbulencia que actualmente atraviesa la Liga de Chajarí y la necesidad urgente de tomar medidas para erradicar la violencia en el deporte local.