Narcos colombianos ganan terreno en las calles de Concordia
Cinco personas fueron detenidas tras una serie de allanamientos en Concordia, que revelaron una preocupante trama de préstamos vinculados al narcotráfico. La investigación, iniciada por una balacera, desveló un esquema en el que ciudadanos colombianos ofrecían microcréditos a consumidores de drogas y, posteriormente, utilizaban la violencia para cobrar las deudas.
El sistema de créditos informales, conocido por años en
Entre Ríos, ha visto un auge en la región, impulsado por la crisis económica.
Los prestamistas colombianos, conocidos por recorrer las calles con carritos
cargados de muebles, se han vuelto una imagen común en muchas ciudades. Sin
embargo, en Concordia, esta práctica ha adquirido un matiz más oscuro: los
prestamistas se han asociado con narcotraficantes locales, ofreciendo dinero a
consumidores de drogas, quienes luego quedaban atrapados en una red de deudas
impagables y amenazas violentas.
La investigación que destapó la trama
La investigación, dirigida por la Policía de Concordia bajo
la supervisión de la División Criminalística y la fiscal Daniela Montangie,
comenzó en junio tras un tiroteo en una vivienda que dejó a un hombre herido.
Lo que inicialmente parecía un caso aislado de abuso de arma se transformó en
un complejo entramado de drogas, usura y violencia.
Los colombianos, que históricamente se dedicaban a prestar
dinero en zonas marginales, comenzaron a enfrentar dificultades para cobrar los
préstamos. Ante la resistencia de los deudores, encontraron una solución en
aliarse con el clan Ayala-Miranda, una banda con antecedentes por portación de
armas y narcomenudeo que domina parte de la zona oeste de Concordia.
El esquema funcionaba así: los colombianos prestaban grandes
sumas de dinero a los Ayala-Miranda con un interés del 10% semanal. A su vez,
la banda prestaba pequeñas cantidades a consumidores de drogas, cobrando
intereses que podían alcanzar hasta el 50%. Así, los prestamistas colombianos
aseguraban el cobro de sus deudas, mientras que los narcos diversificaban sus
actividades delictivas.
Allanamientos y detenciones
Este viernes, tras reunir pruebas de las actividades
ilícitas, la Justicia autorizó una serie de allanamientos en Concordia.
Participaron diversas áreas de la Jefatura Departamental, incluyendo
Criminalística, Investigaciones, y Toxicología. Durante los operativos, se
incautó un kilo de droga (entre cocaína y marihuana), una suma considerable de
dinero en efectivo, un revólver calibre 22, municiones y cuadernos con
registros de los préstamos y deudas.
Cinco personas fueron detenidas, todos con antecedentes penales, mientras que dos ciudadanos colombianos y otros dos implicados permanecen prófugos. Los investigadores también están tras la pista del origen del dinero prestado, sospechando que podría tratarse de lavado de activos provenientes de Colombia.
La ruta del dinero bajo la lupa
Las autoridades creen que los fondos utilizados para estos
préstamos podrían estar ligados al lavado de dinero, lo que abre la puerta a
nuevas derivaciones en la investigación. La trama expuesta en Concordia refleja
un problema creciente en la provincia, donde el narcotráfico y la usura se
entrelazan, generando un clima de violencia y desprotección para los sectores
más vulnerables.
Análisis-7Paginas
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