Detectaron por qué la variante Delta exige extremar los protocolos sanitarios
Investigadores publicaron un estudio en la revista Nature y detallaron sus propiedades: alta contagiosidad y más potencia de infección. Qué recomiendan
Delta es la variante de preocupación del coronavirus que más
está afectando a la humanidad. Fue detectada inicialmente en la India en
octubre del año pasado y hasta el momento fue reportada en al menos 170 países.
Ya está también en la región de América del Sur, y varios de los países ya
existe circulación local de la variante: Argentina, Brasil, Chile, Colombia,
Ecuador, Paraguay y Perú. Su impacto puede cambiar el curso de la pandemia
durante los próximos meses.
Un estudio de científicos del Reino Unido, Suiza, Japón,
India y Sudáfrica confirmó que Delta ha suplantado a las otras variantes que
circulaban no sólo por su mayor capacidad para infectar sino también porque los
anticuerpos neutralizantes de las personas tienen una menor sensibilidad. Por
lo tanto, la infección con Delta es más complicada de controlar.
El estudio fue publicado en Nature y señala una
recomendación: sugiere que las medidas de control como el distanciamiento, el
uso adecuado del barbijo, la ventilación de espacios cerrados pueden tener
efecto en la prevención si se suman a la vacunación contra el COVID-19 de la
población.
El equipo de investigadores estuvo integrado por Ravindra
Gupta, del Departamento of Medicina de la Universidad de Cambridge, en el Reino
Unido, y del Instituto de Investigación de la Salud de África, en Durban,
Sudáfrica. Gupta fue elegido como una de las 100 personas más influyentes del
mundo el año pasado por la revista Time.
Junto con Petra Mlcochova, y otros investigadores, Gupta
ahora publicó el trabajo colaborativo con otros investigadores: llevaron a cabo
una serie de pruebas con más de 130 trabajadores sanitarios de la India entre
marzo y abril pasado, así como pruebas de laboratorio para entender cómo es que
la variante Delta infecta al tejido humano en comparación con otras variantes,
incluyendo la variante Alfa, que había sido detectada en el Reino Unido también
en octubre del año pasado.
Los investigadores encontraron que los 130 trabajadores de
la salud que se infectaron con la variante Delta no tuvieron un riesgo más
elevado de hospitalización, pero sí tuvieron mayor probabilidad de sufrir una
infección posvacunación a causa de esta variante en comparación con otras. De
acuerdo con el doctor Gupta, la variante Delta se replica mejor en las células
pulmonares que la variante Alfa.
Entre los diferentes resultados de la investigación, los
científicos encontraron que en comparación con la variante original del
coronavirus que se detectó en China en enero del año pasado que porta la
mutación D614G (contra la cual se han desarrollado las vacunas actuales), se
encontró que la variante Delta es seis veces menos sensible a los anticuerpos
de individuos que se habían recuperado de una infección anterior.
También se identificó que la vacuna desarrollada por la
Universidad de Oxford y la empresa AstraZeneca era menos efectiva contra la
variante Delta en comparación con las otras variantes. Además, fue ocho veces
menos sensible a los anticuerpos producidos en respuesta a dos dosis de las
vacunas desarrolladas por las empresas Pfizer/BioNTech y AstraZeneca. Aunque
los científicos destacaron la necesidad de que las personas se sigan aplicando
las vacunas porque igualmente brindan alta protección.
En modelos de laboratorio de las vías respiratorias humanas,
la variante Delta fue más eficiente en la replicación que la variante Alfa, una
ventaja que se asocia con la configuración predominantemente escindida de la
proteína de la Espiga de Delta. Esta proteína también permitió que la variante
Delta se replicara y entrara en las células a una velocidad mayor que la de la
variante Kappa. Esa diferencia podría explicar el predominio de Delta.
“Mediante la combinación de experimentos de laboratorio y la
epidemiología de las infecciones en personas ya vacunadas, hemos demostrado que
la variante Delta se replica y propaga mejor que otras variantes comúnmente
observadas. También hay pruebas de que los anticuerpos neutralizantes
producidos como resultado de una infección previa o de la vacunación son menos
eficaces para detener esta variante”, afirmó el doctor Gupta a través de un
comunicado. Y recordó la situación de la India a principios de este año: “Es
probable que estos factores hayan contribuido a la devastadora ola epidémica en
la India durante el primer trimestre de 2021, donde hasta la mitad de los casos
eran individuos que habían sido infectados previamente con una variante
anterior”.
Partha Rakshit, del Centro Nacional de Control de
Enfermedades de Delhi, en la India, coautor principal del estudio, dijo
también: “La variante Delta se ha extendido ampliamente hasta convertirse en la
variante dominante en todo el mundo porque se propaga más rápidamente y es
mejor para infectar a los individuos que la mayoría de las otras variantes que
hemos observado. También es mejor para sortear la inmunidad existente -ya sea
por exposición previa al virus o por vacunación-, aunque el riesgo de
enfermedad moderada o grave se reduce en estos casos”.
En tanto, otro de los investigadores, el profesor Anurag
Agrawal, del Instituto CSIR de Genómica y Biología Integrativa de Delhi,
añadió: “La infección de los trabajadores sanitarios vacunados con la variante
Delta es un problema importante. Aunque ellos mismos sólo experimenten el
COVID-19 leve, corren el riesgo de infectar a personas que tienen una respuesta
inmunitaria subóptima a la vacunación debido a condiciones de salud
subyacentes, y estos pacientes podrían entonces correr el riesgo de padecer una
enfermedad grave. Es urgente estudiar formas de potenciar las respuestas
vacunales contra las variantes entre los trabajadores sanitarios”.
La investigación contó con el apoyo del Ministerio de
Sanidad y Bienestar Familiar, el Consejo de Investigación Científica e
Industrial y el Departamento de Biotecnología de la India, y con fondos de la
fundación Wellcome, el Consejo de Investigación Médica y el Instituto Nacional
de Investigación Sanitaria del Reino Unido.
Por el potencial impacto que puede tener la circulación de
Delta, los investigadores resaltan en la revista Nature que es importante
seguir manteniendo las medidas de control de la propagación del coronavirus
como hasta ahora: mascarillas, distancia social, lavado de manos, y ventilación
permanente. Los autores concluyen que sus hallazgos remarcan la necesidad de
desarrollar estrategias para mejorar las respuestas de la vacuna contra las
variantes del coronavirus.
Días atrás, se difundió también una revisión sobre los estudios
publicados sobre las variantes del coronavirus. Fue realizada por los
científicos argentinos Humberto Debat, del Instituto Nacional de Tecnología
Agropecuaria y la Universidad Nacional de Córdoba, Mariana Viegas, del Conicet
y el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, y Carolina Torres del Instituto de
Investigaciones en Bacteriología y Virología Molecular de la Facultad de
Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires y del Conicet. Entre
otros aspectos, cuál ha sido la dinámica de la propagación de Delta por el
mundo.
“La dinámica de propagación de la variante Delta fue similar
en todos los países donde ingresó y se estableció: se ha caracterizado por un
período aproximado de dos a cuatro semanas de detecciones esporádicas hasta que
alcanzó el 1-5%de los casos, al mes superó el 50% y en seis a ocho semanas
alcanzó frecuencias mayores al 90% de las nuevas infecciones. Es decir, desde
su detección minoritaria en casos de transmisión local sin nexo epidemiológico
con casos importados, Delta se ha tornado predominante y con un desplazamiento
casi total de otras variantes circulantes en el término aproximado de seis a
ocho semanas”, afirmaron los científicos que forman parte del consorcio de
vigilancia genómica Proyecto País, que depende del Ministerio de Ciencia,
Tecnología e Innovación de la Argentina.
Infobae
No hay comentarios.