Causa Los Charrúas: pidieron evaluar si un testigo incurrió en falso testimonio
Con la declaración de un testigo que fue agregado a último momento al debate oral y público, tuvo lugar este miércoles una nueva audiencia de la causa caratulada “Larocca, Julio Cesar; Doubña, Alexandre Emmanuel y Segovia, Ramón José s/ Falsedad ideológica (y peculado en concurso ideal)”.
El juicio se aproxima a los alegatos de cierre y a la
posterior sentencia. Pero antes, a pedido de la defensa de uno de los
imputados, testificó este martes Alcides “Ñato” Besel, exviceintendente de Los
Charrúas, que apareciera en las escuchas telefónicas hablando con los acusados
e incluso utilizando algunos giros de tono amenazante hacia “el rubiecito”,
apodo con el que aludían a Alexandre Doubña.
En sus respuestas ante el tribunal, Besel, visiblemente
nervioso y reticente, incurrió en imprecisiones y contradicciones, al extremo
que, sobre el mediodía, el fiscal José Arias llegó a pedir lisa y llanamente su
detención por “falso testimonio”. El tribunal no hizo lugar, pero resolvió
darle intervención al Ministerio Público Fiscal para que evalúe si, en efecto,
el “Ñato” incurrió en tal delito, expresamente tipificado en el Código Penal.
Antes de que el testigo comenzara a exponer, quedó en claro
que Alcides Besel, contrariamente a lo que en la audiencia anterior había
asegurado el imputado Julio Larrocca, ejerció como viceintendente de Los
Charrúas en el período en que se ejecutaban las obras bajo investigación, entre
2014 y 2015.
El dato inexacto aportado por el presidente de la Liga
Concordiense de Fútbol cuando intentó convencer al tribunal para que Besel no
fuera citado a declarar como testigo, movió al fiscal José Arias a solicitar
que, “cada vez que el doctor Larroca hable, se aclare si lo hace como imputado
o como defensor”. Vale tener presente que el exasesor letrado de la
Municipalidad de Los Charrúas es abogado y ejerce su propia defensa, en
conjunto con Jorge Romero.
En el comienzo del interrogatorio, Besel dijo que en 2014 y
2015, siendo viceintendente, estaba abocado a la labor “legislativa”. “La
relación con el señor Larrocca y el señor Chaparro era mucho menos frecuente,
porque yo estaba abocado a mi trabajo, que era lo legislativo. Los veía un par
de veces por semana para alguna firma. Después, no tuve ninguna participación
ni antes, ni durante la obra de cloacas. Lo único que puedo decir, que puedo
aportar, es con el diario del lunes”, aseveró.
Briceño pidió a Besel que dijese su número de teléfono en
voz alta, de modo de cotejar si era el mismo del que Doubña había recibido
mensajes diciéndole que ya sabía que lo iban a citar a declarar como testigo.
“Quédate tranquilo, no tengo nada para aportar. Sé perfectamente lo que voy a
decir, tu juego no servirá. Lo lamento. Te sigo el juego, nene”, le dijo Besel
a Doubña, según leyó Briceño del chat de WhatsApp.
-¿Qué piensa de la obra? -le preguntó más adelante el doctor
Briceño.
-Yo estaba en la parte legislativa.
-¿Con el diario del lunes, qué opina? -insistió el defensor.
-No sé qué opinar.
-¿Usted dijo algo sobre Segovia, descalificándolo en la
charla con Doubña?
-Lo pude haber dicho y no me acuerdo.
-Indiscutiblemente, lo remitió usted al mensaje. En
consecuencia, ese es el concepto que tiene hoy usted de Segovia -insistió
Briceño.
-No sé. Dije: no puede dejar tirado a este muchacho (por
Doubña). Un consuelo.
-Qué lindo -irrumpió Doubña, que fue llamado a silencio por
los magistrados.
-¿Por qué razón usted dice que pesó más la opinión del
doctor? -preguntó Briceño, en alusión a la gestión y adjudicación de las obras
a la empresa de Segovia.
-Yo no tenía ningún acceso al Ejecutivo. Cuando me enteré
que era Segovia (el empresario contratado), ya era tarde. Me refiero al doctor
Larrocca, tampoco sé del sobre con la firma falsificada.
-¿A quién asesoró el doctor Larrocca?
-Debe ser al intendente, pero, repito que no estaba en la
parte Ejecutiva.
-¿Por qué pesó más la palabra del doctor Larrocca?
-Supongo que el doctor se ha impuesto a Chaparro. Supongo
que el que llevó a hacer la obra, junto con el intendente Chaparro, fue el
doctor Larrocca. A Segovia nunca lo vi, en ningún momento de la obra. No tengo
relación con el señor Segovia.
-¿Qué habló con Doubña?
-Dogña dijo que firmó contra su voluntad y entones le dije
que habrán sido Chaparro y Larrocca. Lo dije para sostenerle la vela, para ponerle
el hombro. Eso es superficial.
-¿Usted nunca le dijo que Chaparro y Larrocca debían estar
presos?
-Le decía lo que quería escuchar Doubña.
-¿Una especie de pastor?
-Estaba medio lejos de pastor, pero bueno.
-¿Acostumbra a dar por cierto los hechos que le transmiten
las personas?
Sí, dentro de lo normal. Si me dicen que me vaya a colgar,
no lo voy a hacer.
En medio de un diálogo tenso, Besel pronunció otra frase que
la atribuyó a “el diario del lunes”: “Los que manejaron la obra fueron los
cuatro imputados dentro del despacho de Chaparro. Normalmente estaban los
cuatro, eso lo sé con el diario del lunes”, aseguró.
Sobre Doubña, afirmó: “Viene de una excelente familia, es un
excelente pibe, pero no puedo defenderlo porque no sé por qué firmó. No tengo
por qué decir que es malo”.
-¿Cómo y cuándo tomó conocimiento de que iba a ser citado
como testigo?, -le preguntaron
-El viernes a la mañana el pueblo entero sabía que yo iba a
ser citado. Salió en los medios de prensa. No hubo una persona en especial que
me lo dijo. Salió en los medios.
-¿A qué hora se enteró?
-Al mediodía o a la tarde, no sé si fue el viernes o el sábado.
No recuerdo.
Las respuestas confusas fueron aún más notorias cuando
preguntaron a Besel cómo se había enterado de que a Doubña le habían ofrecido
el pase a planta permanente a cambio de un “favor”. “Chaparro fue el que me lo
dijo”, contestó. Le hicieron notar que en los chats que están agregados como
pruebas en la causa había dicho otra cosa, había señalado a Larrocca como
fuente. La incongruencia quedó aún más patente cuando las partes se arrimaron
al estrado y observaron las copias del chat en cuestión que obran en el
expediente, del que saltó con total claridad la abierta contradicción de Besel.
Tribunal, partes y el testigo, observando un plano de Los
Charrúas Más adelante, ante preguntas del Fiscal Arias, el testigo admitió que,
como presidente de Concejo Deliberante, no había tenido acceso al expediente de
las obras. Dijo que sólo supo que se estaban haciendo y que tampoco elevó al
Ejecutivo ningún pedido de informe al respecto. Es decir, de los dichos de
Besel se deriva que las obras no habrían pasado por el Concejo Deliberante.
Poco después llegó el cuarto intermedio, que se prolongó por
aproximadamente media hora. La pausa obedeció al pedido que había hecho Arias
para que se escuchase el audio 58, donde -recordó el Fiscal- se escucha a Besel
decir que Doubña era un “traidor”. Los jueces no hicieron lugar a lo
solicitado, por considerarlo “inconducente y superabundante”. “Realizar una
escucha para apreciar si dice o no que era traidor, no cambia”, sostuvieron.
De inmediato, se reanudó el interrogatorio a Besel. El
exviceintendente de Los Charrúas volvió a responder de manera errática, a punto
tal de que su situación quedó comprometida.
Ante una pregunta concreta, en la que se le volvió a pedir
que precise cómo se había enterado que iba a ser convocado al juicio en calidad
de testigo, todo fue confusión. Aludió al viernes a la mañana, pero también
deslizó que había sido al mediodía y luego a la tarde. Mencionó que supo a
través de los medios, pero enseguida hizo referencia a que una persona le había
contado, aunque intentó evitar por todos los medios decir de quién se trataba.
Tras varias repreguntas, terminó por señalar que se había
enterado gracias a una persona de apellido Itterman, de un corralón.
Fiscalía reaccionó ante esta última afirmación, por entender
que era abiertamente falsa, ya que antes de la audiencia, el defensor Rafael
Briceño había exhibido mensajes que Besel envió a Doubña el mismo viernes a las
2 de la tarde, diciéndole que sabía que tenía que concurrir como testigo.
José Arias no dudó en pedir la detención de Besel por falso
testimonio. Rafael Briceño acompañó la solicitud, mientras que los defensores
de Larrocca y Segovia se opusieron. Finalmente, el tribunal halló una salida
intermedia: no lo detuvo, pero ordenó la extracción de testimonios que deberán
ser girados al Ministerio Público Fiscal, para que se evalúe si Besel cometió
delito al faltar al juramento de decir la verdad.
El debate oral y público continuará el lunes 29 de Agosto a
las 8 y 30. Concluyó la etapa probatoria y han pedido para declarar los
imputados Julio Larrocca y Ramón Segovia.
La denominada “Causa Los Charrúas” aparece, en principio,
como un botón de muestra de la corrupción en la obra pública. La investigación
fiscal sacó a luz la presunta falsificación de certificaciones de obras
“PÚBLICAS”, que permitieron liberar de manera irregular fondos también
“públicos”, a lo que se habrían sumado otras ilegalidades, como falsificarle
firma y sello a un empresario para hacerlo aparecer como oferente de un cotejo
de precios fraguado.
(El Entre Ríos)
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