Rodríguez Larreta: "Entre Ríos está como durmiendo la siesta, cuando tiene una capacidad de producción enorme"
Aunque no lo asume de modo directo –alega que está "enfocadísimo" en su trabajo como Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires-, Horacio Rodríguez Larreta se comporta como un candidato presidencial.
Horacio Rodríguez Larreta cada semana visita alguna
provincia y regularmente habla con periodistas de medios del interior. Comenta
que quiere aprender para poder diseñar el plan integral que necesita el país, y
que para eso no sólo escucha a referentes de su espacio, sino que se reúne con
economistas y políticos de diferentes orígenes.
El miércoles, en medio de la agitada interna de Juntos por
el Cambio, recibió a Ahora ElDía en el Centro Cultural Recoleta. Algunas horas
antes se había viralizado el video en el que Patricia Bullrich –otra de las
anotadas en la carrera presidencial- amenazó a Felipe Miguel, Jefe de Gabinete
de Rodríguez Larreta con romperle la cara.
-¿Querés ser Presidente?
-Hoy estoy enfocadísimo en mi trabajo en la Ciudad de Buenos
Aires, donde por más orgulloso que pueda estar de lo que se hizo, hay muchísimo
para seguir haciendo. Lo otro que estoy haciendo es aprendiendo, estoy
recorriendo el país. Estuve en Entre Ríos por ejemplo, hicimos reunión con
productores, comerciantes y vecinos de toda la provincia.
Siempre pregunto, no soy mucho de hablar ni me gustan mucho
los discursos. Voy y pregunto qué se puede hacer mejor, dónde están tus
problemas, podrías producir más, exportar más, tomar más mano de obra, qué
necesitás para eso…
-¿Y qué te dijeron en Entre Ríos?
-En una provincia con un peso grande de la industria
agroganadera y alimenticia, dijeron que con la inestabilidad de la Argentina es
imposible. Imaginate para el productor que le dijeron: Bueno, ahora durante 25
días tenés el dólar soja. Primero, ¿qué pasa con los otros productos?. Segundo,
¿y el día 26? ¿Cómo se puede proyectar? Necesitamos un plan por 25 años, no por
25 días.
Tenés un Gobierno que en lugar de buscar abrir mercados en
el mundo para los productores entrerrianos, es amigo de Venezuela y Cuba. Ahí
no le vamos a exportar.
Otra cosa que escuché es el tema de la inseguridad, que
también empieza a aparecer y hay cada vez más preocupación.
En el tema productivo sienten que el Estado en Entre Ríos
les pone un pie arriba de la cabeza. Liberando las fuerzas productivas, es una
provincia de una riqueza natural fenomenal, de las zonas más fértiles del
mundo.
-Dijiste que estás recorriendo el país como parte de un
proceso de aprendizaje…
-De aprendizaje, para desarrollar un plan, pero siempre
escuchando y trabajándolo siempre con nuestra gente. En el caso de Entre Ríos
está Rogelio Frigerio, Gustavo Hein, trabajando dentro de Juntos por el Cambio
con el radicalismo.
Inflación, la gran deuda
-Es lógico pensar que si pensás en un plan así es porque te
interesa llegar a la Presidencia.
-Me interesa ser parte de un proyecto, no tengas dudas. Las
candidaturas personales, la mía o cualquier otra, con los problemas que tiene
hoy la Argentina, no son para este momento. Hoy tenemos que trabajar para bajar
la inflación. No se puede vivir así. Es una angustia permanente, y los
comerciantes que venden no saben a cuánto van a reponer.
Esos son los problemas de la Argentina, no podemos estar
hablando de candidaturas, peleando en internas.
-Macri ha repetido en estos días a raíz de la presentación
de su libro, que ya no son los mismos, que los 4 años de Gobierno sirvieron
para aprender. ¿No es un aprendizaje costoso que alguien que se propone dirigir
un país experimente mientras está gobernando?
-Lo que estoy aprendiendo es antes. Estoy en el Gobierno de
la Ciudad donde no estoy aprendiendo sino trabajando todos los días, y mucho.
Creo que el resultado de eso se ve.
A nivel nacional tenemos que aprender de los errores, hay
que hacer autocrítica. Macri en sus libros ha hecho autocrítica respecto de qué
pasó. Si tengo que elegir una prioridad, el tema de no haber combatido la
inflación es un gran desafío pendiente.
Si no estabilizamos este país, esta locura de los precios
que siempre los corremos de atrás, el país no va a crecer. Tenemos que tener un
plan de desarrollo que defina cuáles son los sectores, como el agro en Entre
Ríos, el litio en el Norte, Vaca Muerta. A quién le vamos a vender. Dónde están
esos mercados, cómo los vamos a ir a abrir. Cuáles son los acuerdos comerciales
que necesitamos para que los productos de Entre Ríos puedan ser vendidos en el
mundo. Eso es un plan de desarrollo, y hay que pensarlo a largo plazo.
Qué técnicos vamos a necesitar en Entre Ríos para la
tecnología que está incorporando el campo, quién los va a capacitar, dónde se
van a formar. Necesitás un sistema educativo que acompañe ese proceso. Eso es
un plan integral.
La interna y el caso Israel
-¿Y con quién te imaginás trabajar en ese plan integral?
-En Entre Ríos Frigerio, Hein y todo el equipo. A nivel
nacional estamos trabajando desde el PRO con Hernán Lacunza, que es el
coordinador del equipo, Luciano Laspina, hay economistas como Martín Lousteau,
Martín Tetaz, López Murphy… pero también tengo relación y escucho a otros como
para tener una apertura, como Carlos Melconian o Martín Redrado. Voy escuchando
distintas alternativas.
Y el equipo nuestro del PRO trabaja con el radicalismo y la
Coalición Cívica para tener un plan común de todos.
-En estos días más que trabajo conjunto se ha visto un
tiroteo cruzado, incluidas amenazas de arreglar las cosas rompiéndole la cara a
otro.
-No creo en la violencia ni en las agresiones, es totalmente
lo contrario de lo que necesita el país, pero tampoco me engancho en
discusiones internas. Yo sí estoy trabajando en los planes, escuchando,
aprendiendo y estudiando para ver cuál fue el mejor modelo del mundo para bajar
la inflación. Estuve en Israel hace dos meses, que es un muy buen ejemplo,
tenía 500% de inflación, y con un plan y el liderazgo de Shimon Peres lograron
bajarla.
-Hace unos días se publicó que conversás de manera frecuente
con Florencio Randazzo, que junto con Emilio Monzó mantienen reuniones con
dirigentes como Juan Schiaretti y Juan Manuel Urtubey. ¿Quiénes te gustaría que
estén sentados enfrente para construir un acuerdo como el israelí?
-Primero de todo, los que están de este lado, consolidar un
proyecto común con todos los miembros de nuestra coalición, porque como
mencionaste, con las discusiones y tensiones que hay, no es obvio eso. Hay que
trabajar y mucho para eso, hoy lo estamos haciendo.
Después, hay gobernadores, intendentes… Yo no creo que sumen
los extremos. Hay que dejar de lado los extremos de un lado y del otro. Las
posiciones extremas, que se transforman en agresivas y violentas, en esto de
que si no pensás igual que yo sos el enemigo. Hay que dejar esa actitud de
lado, que ha sido la que ha gobernado la Argentina casi los últimos 80 años,
durante algunos años mucho más agresivo porque entre militares y civiles hubo
situaciones horribles y durísimas.
Fundadores y fundidores
Pero aún en la vuelta a la democracia, esta cosa de la
agresión, de la pelea con el otro, cada Presidente nuevo empieza de vuelta, es
un fundador…
-O un fundidor…
-Un fundador que muchas veces termina como un fundidor, y
así estamos. Pero tenemos que cambiar, cam-biar. Esa es la clave. Hagamos algo
distinto, porque si hacemos lo mismo que venimos haciendo los últimos 80 años,
el resultado será el mismo: más fracaso y frustración, en un momento en el que
la Argentina tiene muchas oportunidades porque el mundo, producto de una
situación dura como es la guerra, necesita lo que la Argentina produce, nuestra
energía, alimentos.
-¿Hay cosas buenas que haya hecho la administración Bordet y
sobre las cuales se pueda seguir construyendo? ¿Cómo lo ves a Frigerio en ese
sentido?
-Frigerio es un tipo muy abierto, que coincide con mi visión
de que no es cuestión de tirar todo por la borda y empezar de vuelta. Pero son
Frigerio y su equipo los que tienen que definir qué es lo que hay que hacer y
qué temas continuar. No tengo ninguna duda de que la actitud que tiene es
constructiva, si hay cosas que el equipo evalúa que estuvieron bien, las
seguirán, es lo que tenemos que hacer en la Argentina.
Entre Ríos es una provincia que está como durmiendo la
siesta, en un letargo, cuando el mundo explota y tenés una capacidad de
producción enorme. Podría estar funcionando mucho mejor. Tenemos el equipo
preparado y trabajando para eso, y en el marco de un país más federal como
debiera ser la Argentina tendrán muchas más posibilidades de desarrollar la
provincia.
De cuna desarrollista
-¿Cómo te definís políticamente?
-Soy del PRO y si querés ideológicamente, vengo de cuna
desarrollista. Mi Viejo era muy cercano a Frondizi. Soy ahijado de Rogelio
Frigerio (el abuelo del actual diputado nacional por Entre Ríos). Creo que la
Argentina necesita un modelo de desarrollo para volver a crecer y desarrollarse
regionalmente, para explotar, por ejemplo, toda la agroindustria que tenés en
Entre Ríos, que hoy con la necesidad de alimento que hay en el mundo podría
estar mucho mejor. La industria avícola, granos…
El mundo necesita los alimentos argentinos. ¡Mirá la
oportunidad que tiene Entre Ríos para eso con toda la riqueza natural que
tiene! Eso es el desarrollismo, la prioridad tiene que ser desarrollar la
Argentina: más producción, más inversión, más trabajo. Tenemos litio en el
norte, todo el centro fértil, la energía en Vaca Muerta, la industria del
conocimiento, la tecnología, la robótica. Eso también podríamos estar
exportando. Tenemos mucha gente capacitada, el potencial en la Argentina es
enorme, en Entre Ríos es muy grande.
-¿Qué se necesita para transformar ese potencial del que se
habla eternamente en realidad?
-Se necesita una nueva generación, como tuvimos la
Generación del 80, y en el siglo pasado la del 83, que fue la que nos devolvió
la democracia. Necesitamos que la Generación del 23 sea la que nos devuelva el
crecimiento, la que siente las bases para un desarrollo durante 40 años
seguidos. Llevamos 40 años de democracia, ahora necesitamos 40 años de
democracia más desarrollo. Yo quiero ser parte de eso.
Ni maquillaje ni paciencia: por qué la luna de miel bajaría
de 100 días a 100 horas
Horacio Rodríguez Larreta repite a lo largo de la charla que
la Argentina necesita un cambio profundo, rápido, duradero e integral. “No hay
lugar para el maquillaje. No hay tiempo que perder. El próximo Presidente, me
toque a mi o a quien sea, no tiene más 100 días, tiene 100 horas para trazar un
rumbo claro hacia dónde va”, explica.
-¿Eso implica un plan de shock?
-No, eso no quiere decir que todas las medidas se tengan que
tomar el día cero. Significa que tenés que tener un rumbo muy claro y decirle a
la gente: vamos para allá y lo vamos a mantener. Tiene que ser profundo, rápido
y duradero en el tiempo. No sirve tener un plan exitoso durante cuatro años que
cuando cambia el Gobierno vuelve todo para atrás, como marca la historia de la
Argentina.
Y tiene que ser un plan integral. No hay un plan para bajar
la inflación, eso no existe. Tenés un plan de desarrollo que muestra cómo la
Argentina volverá a crecer, en el que hay un capítulo importante que es el plan
de estabilización y baja de la inflación. Porque por más que logres la
estabilización, si no hay un plan de desarrollo y la Argentina no crece, al año
volvés a tener inflación.
Entrevista exclusiva con Ahora El Día.
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