Diana Slavkin, la periodista de Concordia que vivió en carne propia el juicio del caso Fernando Báez Sosa

“El aire desde que ingresas a dolores es Fernando”, dijo.

La periodista concordiense Diana Slavkin tuvo la oportunidad de poder ser partícipe y realizar una cobertura en el juicio del caso Fernando Baez Sosa, un crimen que golpeó fuertemente al país, haciendo que el pueblo se comprometa enteramente con la causa. En una nota exclusiva para 7Páginas, brindó detalles de su experiencia en el juicio y lo vivido en las calles de Dolores desde su perspectiva.

Diana se encontraba vacacionando en San Bernardo, lugar que se encuentra a tan solo 2 horas del lugar donde se llevaría a cabo la inminente sentencia a los rugbiers acusados de asesinar a Fernando. Por eso, no dudó un segundo en buscar la manera para poder ir al juicio, ya que, según lo comentado, seguía todos los detalles de la causa desde el principio, y estaba totalmente comprometida con este caso. “Duele, es un tema que duele muchísimo, porque yo tengo una idea de que, si bien hay una sola víctima, hay nueve vidas que se perdieron ahí”, mencionó la periodista.

Se comunicó con cronistas principalmente de Crónica y c5n (con quienes tenía contacto por haber realizado anteriores coberturas para ellos) que le enviaron la ubicación, le informaron que podía ir, entrar al vallado integrado por medios de comunicación y familiares, pero no ingresar al estrado por la razón de que había un tope de personas y se necesitaba previa autorización. Sabiendo esto, Diana no dudó un segundo: Buscó lo necesario, pidió la ubicación exacta, y se encomendó a la locación del juicio.

“A partir de ahí tanto en lo profesional como personal fue distinto, porque uno ve esos carteles que yo veía siempre en la tele, las fotos de Fernando por todos lados, los medios de comunicación, la gente. A partir de ahí fue estar en carne propia, vivir lo que uno estaba viviendo en televisión” dijo Slavkin, quien posteriormente mencionó cómo las calles de Dolores se inundaban de agonía y tristeza por Fernando: pancartas en los ingresos, vecinos de la ciudad con remeras de “Justicia por Fernando”, y además lo que tanto se repetía de que justicia era perpetua algo que “si bien no fue así, fue una sentencia dura, aunque no todos estén de acuerdo”.

Al llegar al lugar, logró ver como ingresaban los principales protagonistas del juicio: Tomei; los imputados; el Dr. Améndola, con quien pudo tener una entrevista exclusiva; y por último, los papás de Fernando, quienes eran los principales protagonistas de ese día. Todos menos Fernando Burlando, quien no había entrado por la puerta principal.

Habían pasado 30 minutos del mediodía, en las calles del vallado se vivía mucha euforia, compañerismo entre los periodistas, gente corriendo. Muchos medios de comunicación, no solo del país, sino que también de Estados Unidos, Paraguay, México y España.

Diana junto a unos periodistas se fueron al bar de la esquina, donde presenciaron por televisión la sentencia y vivieron varios de momentos de tensión: el momento donde se declaró culpables a los rugbiers, llantos de la gente, el desmayo de Thomsen, entre otros.

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Al finalizar el juicio, rápidamente dejaron el bar para poder presenciar la salida de los abogados, familiares e imputados. Cuando salió Burlando, abogado de los padres de la víctima, la periodista tuvo la oportunidad de dialogar con él y realizarle una entrevista exclusiva. Diana destaca lo abierto que resultó el abogado de la familia Sosa: “Lo que tiene burlando es que no importa que seas grande, chico, o de comunicación mediana, responde uno por uno a todos con las mismas ganas, y eso está muy bueno”. A continuación, habló con Fabián Améndola, también abogado de la familia, y mantuvo una conversación extensa donde, entre varias declaraciones afirmó que “más allá de que Silvina y Marcelo (quienes ahora son los protagonistas) estaban conformes, Burlando y su equipo anticiparon que iban a apelar”.

“Feliz, tanto en lo personal en la cuestión de que pudimos poner la meta y cumplirla. No nos quedamos con las ganas” concluyó la periodista, quien también le destacó a un cronista de 7Páginas el buen ambiente de compañerismo que se vivía en el lugar, algo que la ayudó también a conocer gente nueva de los medios nacionales y encontrarse con aquellos con los que en algún momento tuvo la oportunidad de trabajar. “Dentro de todo lo horrible que es el motivo por lo que uno está allá, está buenísimo como es un lugar donde uno se siente en familiar”.