Dirigente sindicalista de Concordia, será condenado con prisión efectiva tras reconocer todos los hechos que se le imputaban

Este viernes pasadas las 9 de la mañana, se llevó a cabo en los Tribunales de Concordia, la audiencia de juicio abreviado contra el dirigente sindicalista de la UOCRA – Ramón Alberto Monzón –, su hermano Andrés Jorge “Bechu” Monzón y el también integrante del gremio de la construcción, Héctor Gustavo Zaragoza.

En la audiencia, los hermanos Monzón y Zaragoza reconocieron ante la vocal Silvina Gallo los hechos que se les imputaban y de esa manera, aceptaron la pena que fue acordada través de un juicio abreviado entre el fiscal José Arias y los abogados defensores de los acusados.

Al respecto el reconocido sindicalista, Ramón Monzón, será condenado a tres años  y diez meses de prisión efectiva. El gremialista está acusado de los delitos de amenazas coactivas con armas, abuso de armas y desobediencia judicial en concurso real.

Mientras que Héctor Gustavo Zaragoza, otro integrante del gremio de la construcción desde hace muchos años, será condenado a 3 años de prisión condicional. La misma pena recaerá sobre el hermano de Ramón, Andrés Jorge “Bechu” Monzón.

Ahora resta que se lleve a cabo la audiencia en la que la vocal Silvina Gallo procederá a realizar la lectura de sentencia de los tres imputados. La misma está prevista para el jueves 27 de junio.

La causa que logró terminar con el poder de los Monzón y sus aliados

Héctor Gustavo Zaragoza, y los integrantes de un  brazo armado, Danilo Gauto y Andrés Monzón, fueron detenidos en febrero pasado luego de distintos allanamientos que incluyeron un centro médico de Concordia vinculado al sindicato de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), en el marco de una investigación llevada adelante por la División Criminalística a cargo del comisario inspector José María Rosatelli, por una serie de balaceras entre bandas  vinculadas a la venta de drogas.

En ese  operativo también fue detenido Daniel Carrasco, quien junto a Gustavo Zaragoza,  formaban parte del gremio de la construcción y eran uno de los referentes de la UOCRA seccional Concordia, sindicados de proveer las armas con las que se cometían y efectuaban las balaceras en distintas zonas de la ciudad.

Ramón Monzón, otro referente de la UOCRA Concordia, también había sido detenido por la policía en diciembre del 2023 tras un mega operativo de 17 allanamientos. Las pericias realizadas sobre su celular aportaron pruebas para llegar a personas sindicadas de ejercer un “escenario de inusitada violencia” en la ciudad.

Entre esas personas se encontraban Andrés y Rodrigo Monzón, ambos hermanos de Ramón, Ignacio Monzón (hijo de Ramón Monzón), Danilo Gauto y Enzo Escalante. Todos ellos formaban una Asociación Ilícita que amedrentaban e imponían miedo sobre las personas con los que tenían algún tipo de conflicto teniendo como  trasfondo la defensa del territorio para el tráfico de drogas.

Su poderío se terminó luego de que la División Criminalística a cargo del comisario José María Rosatelli,  bajo las directivas de los fiscales José Arias, Macarena Mondragon y Daniela Montangie, realizara una extensa y exitosa investigación que permitió detenerlos.

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