Historia de Ramírez: Batalla de Cepeda y sus Consecuencias Políticas, Institucionales y Militares, por Augusto José María Alasino
La Batalla de Cepeda ocurrida el día 1 de Febrero de 1820,
no fue solo una batalla más, sin dudas
fue una contienda que tuvo consecuencias políticas, institucionales y militares
muy substanciales que exceden largamente las expectativas que por sí misma
creó.
Por ejemplo, entre otras:
● Sin Cepeda no
hubiera existido el primer pacto preexistente del que habla el preámbulo de la
Constitución Argentina.
● Sin Cepeda no
habrían trascendido las instrucciones de Artigas a sus diputados a la Asamblea
del año XIII
● Sin Cepeda no
se hubiera establecido el sistema federal como forma de gobierno, apurando el
fin del directorio y del Congreso de Tucumán (ya en Buenos Aires).
● Sin Cepeda no
se hubieran recuperados las autonomías provinciales. (Anarquía del año XX)
● Sin Cepeda no
se hubiera rechazado definitivamente la Tutoría y expectativas de la casa de
Braganza, y del imperio del Brasil sobre
las Provincias Unidas. La perspectiva española llegó hasta 1826.
● Sin Cepeda la
abrogación a la Constitución de 1819 y las expectativas políticas del partido
Directoral se hubieran mantenido.
● Sin Cepeda
habrían continuado separadas las Provincias de Tucumán, Cuyo, Salta, Córdoba,
Corrientes, obviamente Santa fe y Entre Ríos
● Más lejos aún,
sin Cepeda tal vez el Gral. José de San
Martin no hubiera llevado a cabo la “Expedición Libertadora de Perú”.
Es sabido que dicha contienda se libró entre el ejército
federal comandado por Estanislao López y Francisco Ramírez, contra el ejército
del Directorio de las Provincias Unidas, que articulaba el ejército de Buenos Aires. En un paraje ubicado a solo
80 leguas (unos 400 Kilómetros) de la ciudad de
Buenos Aires López le entregó la jefatura del Ejército Federal a
Francisco Ramírez (de solo 31 años de edad), y que fue tan fulminante el ataque
que se la conoció como "la batalla de un minuto” por la velocidad de la
arremetida y la precipitación en que las tropas de Balcarce se retiraron del
campo de batalla.
Ramírez afirma más tarde que detuvo la persecución y esperó
la rendición porque “…no quisimos privar de brazos para la defensa de enemigos
exteriores…” (Carta de Ramírez del día 2 de febrero de 1820)
También es conocido que apenas tres meses antes
(aproximadamente Octubre de 1819) López y Ramírez, en Coronda, utilizando la
Imprenta del patriota Chileno-Español José Miguel Marcos Carrera (príncipe de
los caminos según Pablo Neruda) en la “Gaceta Federal”, (Periódico creado
para refutar y desmentir a la Gaceta de
Buenos Aires), proclaman que marchan
“…para arrojar del mando a los directoriales, determinar la igualdad de las provincias,
consolidar la unión de las provincias unidas, acabar con los portugueses y
españoles, declarar la libertad interior, la paz interior y la independencia de
sud-américa…” (Nótese que todavía hoy se habla de sud-américa tal como lo hace
el Himno Nacional “…provincias unidas del sud…".
Asimismo, se conoce que un mes antes el Ejercito del Norte al mando de Manuel
Belgrano se había sublevado en Arequito (8 de Enero de 1820) tras la
convocatoria de Juan Martin de Pueyrredón a luchar en defensa del Directorio y
contra el ejército federal, y que como consecuencia de esto y también de la
negativa de San Martin, José Rondeau sustituyó en el Directorio al mencionado
Pueyrredón (10 de Junio de 1819) .
Se sabe que San Martin se había negado a traer el ejército
de los Andes, o sea al repaso, (= revisar, volverlo a pasar de Chile a las Provincias
Unidas ) en defensa del gobierno del directorio, y por carta a Artigas, del 13
de Marzo de 1817, le hizo saber dicha decisión,
y aunque condena la actitud
beligerante del Oriental afirma enfáticamente: “… que su espada no saldrá de su
vaina por problemas políticos…”. Cuando Pueyrredón le escribe “se rompió el
baile con Artigas” (diciembre de 1817),
San Martin se mantiene en la decisión tomada nueve meses antes.
Hasta aquí la cronología histórica. De lo que aquí se trata
es de analizar las consecuencias directas e indirectas, políticas,
institucionales y militares de este combate.-
● La primera de
ellas es que, como resultado, se firmó el Tratado del Pilar el día 23 de
Febrero de 1820 (22 días después de Cepeda). Es el primero de los “Pactos
Preexistentes” (…”en cumplimiento de pactos preexistentes…”) del que hace
mención el Preámbulo de la Constitución Nacional y…” protestan…” porque el
gobierno…debe ser “… a favor de la federación…” (artículo primero del tratado).
● La segunda: el
tratado del Pilar repite las instrucciones de Artigas que “Los Pueblos Libres”,
a través de sus diputados, llevaron a la Asamblea del Año XIII.
En efecto, en Abril de
1813, entre el 5 (inicio) y el 21
(cierre) se reunieron en el congreso de Tres Cruces, (extramuros de Montevideo,
hoy barrio de esa ciudad),…” los diputados de cada uno de los pueblos de la
Banda Oriental del Uruguay…”. Es allí
donde Artigas dice la famosa oración, fruto de la pluma de Miguel Barreiro, y
pronuncia la célebre frase: "…mi autoridad emana de vosotros y ella cesa
ante vuestra presencia soberana…”. Se eligieron diputados según la decisión
propia, y no según las instrucciones de
Buenos Aires, (que no le daba rango de provincia a la Banda Oriental), los que
en principio no fueron aceptados y mediante la mediación de Larrañaga y la
rectificación de la designación en la Asamblea de Capilla de Maciel, ingresaron
a la Asamblea del año XIII. En una apretada síntesis estas instrucciones,
además de exigir el desagravio de Artigas y del pueblo oriental (atribuido a
Sarratea) proponían entre otras: *) Independencia absoluta *) Sistema de gobierno confederal *) Libertad civil y
religiosa *) Igualdad y libertad para las provincias *) Darse su forma de
gobierno *) Gobierno federal solo para negocios federales, manteniendo el poder
no delegado, *) Limites de la Provincia Oriental *) Alianza para la defensa
común inviolabilidad de la soberanía provincial *)Libre navegación de los ríos
*) Puertos de Maldonado y Colonia propios; y otras referidas a derecho civil, a
Tacuarembó, a las misiones y su pertenencia, ejercito propio que preservaba la
futura provincia oriental. Como nota de color planteaban también que “…el gobierno central…no estuviera en
Buenos Aires”. ( Tal vez sea esta exigencia una de las
concausas que decidieron al Directorio, convocarlo en Tucumán).- Las
instrucciones están contenidas en el Tratado del Pilar: Sistema Federal,
Igualdad de las provincias, Fin del directorio; Gobierno central acordado entre
las Provincias, Principio de la alianza defensiva, Libre navegación de los ríos
por las provincias amigas, Devolución de honores y propiedades, Juicio público
para los directores (Pueyrredón y Tagle) por crímenes contra la libertad de la
Nación, Libertad de Comercio y armas, Recuperación de la autonomía de las
provincias y fin del sistema directoral. Reconocimiento a Artigas y a sus
intereses y la integración de la banda oriental.-
● Cepeda define
por primera vez, mediante un acuerdo la forma de gobierno federal que preconizaban las provincias y era
sostenido fuertemente por Artigas; y rechaza absolutamente el instituido por la
Constitución de 1819, promulgada el 22 de Abril y jurada el 25 de mayo de ese
año. Eso motivó el alzamiento de Entre Ríos y Santa Fe. Cepeda la eliminó;
puso fin al Directorio como expresión de
gobierno absolutamente centralista y dirigido por la ciudad de Buenos Aires.
El”Director Supremo de las Provincias Unidas del Rio de la Plata” fue un
sistema de gobierno creado por la Asamblea del año XIII y gobernó las
Provincias Unidas desde el 31 de Enero de 1814 hasta Cepeda; duraba dos años en
su mandato, era asistido por un Consejo de Estado de siete miembros y un
Congreso que tenía a su cargo la función legislativa. La Constitución de 1819
lo confirmaba. Belgrano la acata con mucho desagrado y manifestando que solo lo
hace porque es la voluntad soberana del Congreso.
● Cepeda
recupera las autonomías provinciales. (Anarquía Año XX). Hasta allí se fusionaba el Gobierno de
Buenos Aires con el Gobierno de las Provincias Unidas. De manera que las
Provincias incorporadas a las Provincias
Unidas (gobierno central del Directorio) en realidad estaban sometidas al
gobierno de Buenos Aires. Esto se percibía mucho más en las provincias del
litoral (La Banda Oriental, Corrientes, Entre Ríos y Santa Fe) que en las del
Norte. Cuando se dispone el traslado del Congreso de Tucumán el 17 de Enero
de 1817, a Buenos Aires, después de una
“rápida votación” (los diputados por Córdoba se oponen y son expulsados del
Congreso), se aprueba la Constitución de 1819, se produce la secesión o
separación de alguna de ellas, en forma directa o indirecta. Se separaron las provincias de Tucumán y Cuyo; y Salta se
declaró solo aliada de las Provincias Unidas.-
● Sin Cepeda, no se hubiera rechazado y condenado definitivamente la
tutoría de la Casa de Braganza (dinastía dominante en el Imperio del Brasil). El directorio mantenía
relaciones estrechas con ese linaje que ponía en riesgo la libertad de la
Nación. En realidad hay acuerdo en pensar que la constitución de 1819,
preparaba el terreno para que un príncipe europeo reine en las provincias
unidas.
Esto lo advierten López y Ramírez, en la proclama de Coronda
(Octubre de 1819) y Artigas en la nota al Congreso de Tucumán del mes de
Diciembre de 1819, en donde le exige que conmine la acción de los directoriales
y el acuerdo con la corte de Portugal. La victoria del Ejército Federal en
Cepeda excluye definitivamente ese escenario y desanima las pretensiones de la
corte de Portugal. Sin embargo hasta 1826 se seguirá especulando con un
príncipe español (San Martin vetaba a los Borbones y una potencia menor).
● Cepeda abroga
la Constitución de 1819, la suprime y la invalida, y al hacerlo descarta toda
posibilidad de que los directoriales, devenidos en unitarios, conformen un
sistema de gobierno que no sea el sistema federal. La Constitución de 1819,
que instituía el Directorio como Poder
Ejecutivo y el sistema unitario de gobierno, es
terminantemente contradicho en el resultado político de la contienda: que es el
Tratado del Pilar. El Congreso de Tucumán, radicado en Buenos Aires desde 1817
y bajo la influencia directa del gobierno del Directorio la aprueba y le da una
legalidad tramposa y una legitimidad incierta. Pero sin duda esta apariencia de
legal y legítima le hace decir a Belgrano ( lo digo más arriba”… que no está de
acuerdo pero la acata…”. La única forma de invalidarla era mediante las armas y
una derrota del ejército que la sostenía. Precisamente eso ocurre, el ejército
federal se moviliza contra la simulada legalidad y legitimidad de la misma.
● Sin Cepeda se
hubieran mantenido separadas las Provincias de Tucumán y Cuyo, molestas por el
amañado traslado del Congreso de Tucumán a Buenos Aires en 1817,;Salta auto-declarada
solo aliada; todas en disconformidad con la Constitución de 1819; Córdoba independiente desde 1815 tras su
expulsión del Congreso de Tucumán por oponerse a su traslado: lo mismo que la
Banda Oriental desde el 19 de Agosto, y
Corrientes independiente desde Abril de 1814. Santa Fe declaro su independencia mediante el tratado de Santo
Tome el 9 de Abril de 1816. Depuesto el Directorio y abrogada la constitución
de 1819 cambiaron su actitud. Desde 1813 en la Banda oriental Artigas mandaba a
jurar por la independencia. En Salta y Tucumán tuvo mucha influencia San
Martin.
● Cepeda y su
influencia en la expedición libertadora a Perú: La batalla de Cepeda tuvo como
consecuencia directa la exoneración del Directorio, la abrogación de la Constitución
de 1819, la disolución del Congreso de “Tucumán” y la recuperación de la autonomía de las
provincias.
Sabido es que tanto Pueyrredón (Enero de 1819) como Rondeau
(Noviembre 1819) le habían indicado a San Martin que procediera al “repaso” del
ejercito de los Andes, de Chile a las Provincias Unidas, para sofocar la
rebelión de las provincias del Litoral. Antes habían dado instrucciones en el
mismo sentido a Belgrano, lo que determinó
el motín de Arequito.
San Martin había tratado de que el gobierno de Chile mediara
entre Buenos Aires y Artigas, lo que desencadenó la ira de Pueyrredón. Supongo que el Libertador
sentiría estar en deuda con Pueyrredón por la ayuda al ejercito de los Andes;
su negativa se expresó en la toma de licencia por enfermedad y posteriormente
por su renuncia . (Por esta decisión la logia Lautaro lo consideró un enemigo y
esta organización comienza a debilitarse).
Lo cierto es que luego de consolidar la libertad de Chile viaja a Buenos
Aires, por apoyo para la expedición al Perú (mayo 1818 a Enero 1819). Él sabía
que el fracaso del ejercito del Norte en su avance sobre Lima seria permanente,
y había dado instrucciones a Güemes que solo hiciera guerra defensiva, para
atacar por mar (desavenencias con Rondeau que había intentado cambiar las
“ordenes” de Güemes). Luego de Cepeda la autoridades nacionales de las
Provincias Unidas habían cesado. En consecuencia el Tratado Irisarri-Tagle (alianza ofensiva con Chile
para terminar con el dominio español en el norte -1819/1820, mayo) era de
cumplimiento imposible. El 8 de Julio de 1819 San Martin había enviado carta a
Estanislao López llamando a la pacificación, y dos meses después Santa Fe rompe
hostilidades con Buenos Aires. Se había ocupado, también, de hacerle llegar a
Bustos, Gobernador de Córdoba, la idea de que armonizara con Buenos aires (16 de Febrero de 1820). El 3 de Enero
de 1820 en carta a Godoy Cruz afirma que no se mezclaría en antagonismos políticos y el 8 del mismo
mes renuncia.
La Batalla de Cepeda había dejado a San Martin y al ejército
de los Andes sin una autoridad
política-institucional. La que había poseído hasta Cepeda le ordenaba reprimir
el ejército federal, orden que la rechaza. Pero esa acefalia a la vez le
permitía pensar poder llevar adelante la expedición al Perú sin transgredir
órdenes contrarias.-
Esta situación concretó su renuncia, lo que hizo ante su
oficialidad. Sus tropas lo ratifican en el mando (acta de Rancagua 2 de abril
de 1820) y como tal es luego designado por O’Higgins como General en Jefe de la
Expedición al Perú (6 de mayo de 1820). Su Estado Mayor son todos “argentinos”: Las Heras, Lemos y Fray Luis Beltrán. Días después, el 16 de Junio, en
carta a Godoy Cruz le anoticia que va a “…abandonar mi país en beneficio de
América…”
Debido a esa situación política, La Expedición Libertadora
del Perú no llevó la bandera de Belgrano
al frente, sino la de Chile, eso sí, con tres estrellas y no con una,
simbolizando así los tres países que la componían…El resto de esta historia es
muy conocida…
(7Paginas)
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