¿Nos vamos para arriba ?, por Dante Pitura

El reto asumido por la arquitectura vertical, no es el de batir récords de altura, sino el de generar un mayor aprovechamiento de un recurso no renovable, el suelo.

La planificación no se debe realizarse pensando únicamente en la sociedad del presente, sino también en la del futuro, no solamente de una generación.

“Menos es más” representa una de las ideas principales, menos en el sentido de que se utilizará menos espacios en el suelo existente y menores recursos para insfraestructura, no solo construirlas, sino, mantenerlas y se le dé importancia al tiempo de las personas, facilitando las distancias.

La expansión de la ciudad de esta forma, representa un consumo exagerado de un recurso limitado, el suelo, así como estamos no sirve las medidas de los lotes, porque empiezan con una edificación y continúan completando el lote, a veces de manera desordenada y no se logra el efecto que se le quiere dar al barrio, ya que el impacto de las edificaciones no es el planificado, además se impermeabiliza el suelo, se destruyen y aíslan los ecosistemas naturales y otras consecuencias como la pérdida de tiempo, el uso desmedido del auto, contaminación ambiental, disminución de la cohesión social y de la rentabilidad económica del Municipio y una mayor eficiencia en la gestión del territorio.

El uso mixto de suelo en un edificio de mediana altura nace del deseo de poder realizar distintas actividades cotidianas recorriendo distancias “caminables” desde el lugar que las personas viven, promover espacios recreativos naturales ocupando menos espacios para la construcción.

Uno de los objetivos del proyecto es que brinde a sus usuarios un espacio en el que puedan mejorar su calidad de vida urbana en la cual puedan encontrar sus actividades diarias rodeadas de un ambiente armónico que cuente con mucha vegetación.

El proyecto se basa en el aumento de la densidad de uso de suelo del lugar en el que se localice el proyecto, la altura máxima permitida sería de ocho plantas con actividades paralelas a la vivienda como comercios, oficinas, gimnasios, piscinas, guardería, gastronomía, deportes, etc. Resultando un espacio cohesivo y de familiaridad entre los habitantes, reglamentando una distancia mínima entre las edificaciones para respetar el soleamiento, ventilación, iluminación y visuales, espacios con muchos jardines aumentando el espacio perceptivo, por medio de la colocación de la menor cantidad de muros posibles, con imágenes exteriores llamativas e impactantes con su entorno, esto sin dejar de respetarlo o volverse inurbano.

En resumen, se ocupará menos espacio, se aprovecha el espacio aéreo, menos desarrollo de insfraestructura a construir y mantener, el precio del terreno se hace accesible, se hace una sola cimentación, un solo sistema de instalaciones, los pisos de arriba se cotizan por el privilegio visual, se controla con más eficiencia el crecimiento habitacional, por todas estas razones, se obtendrán mayores resultados a nivel urbano, social, ambiental y económico.

Nota de opinión del arquitecto Dante Miguel Antonio Pitura, compartida en 7Paginas hablando sobre el proyecto que impulsa el municipio de la ciudad de Federación en lotes de zona termal.