De no creer: el líder de Los Monos tenía un teléfono fijo en su celda

Durante una requisa realizada este lunes en el Penal Federal de la ciudad de Marcos Paz, se accedió a la celda donde se encuentra alojado el líder de la banda de Los Monos, Ariel “Guille” Cantero, por estar sindicado como el principal sospechoso de estar detrás del atentado ocurrido el miércoles pasado en Rosario contra el Centro de Justicia Penal de esa ciudad del sur santafesino.

El jefe narco actualmente está en pleno juicio por atentar contra jueces, edificios judiciales y policías.

Para sorpresa y asombro del fiscal provincial Franco Carbone, quien ordenó el procedimiento, se logró el hallazgo y el secuestro de un teléfono de línea. Este teléfono, según indicó una fuente judicial cercana a la causa, era considerado totalmente "legal”, pero se están realizando varias investigaciones para determinar desde cuándo esto es así.

El operativo de este lunes fue llevado a cabo por la DDI de Mercedes, con jurisdicción en Marcos Paz, a instancias de los fiscales Carbone y Federico Rébola, quienes solicitaron un permiso al Juzgado de Mercedes, quienes finalmente autorizaron el procedimiento.

Ariel Cantero, quien el viernes pasado, aseguró ante el tribunal del Poder Judicial que lleva adelante el juicio en su contra por la causa balaceras, que su "oficio" consiste en "contratar sicarios para tirar tiros a los jueces”, y que no participó este lunes en la segunda audiencia del debate oral y público con el argumento de que iba a recibir la visita de su esposa.

En el juicio, Cantero está sospechado de planificar siete de los quince ataques a domicilios de jueces, policías, edificios judiciales y la sede de la ex Policía de Investigaciones (PDI).

Los fiscales Matías Edery, Gastón Ávila, Miguel Moreno y Aníbal Vescovo solicitaron 24 años de prisión.

El líder de la banda narcocriminal tiene 32 años de edad y acumula fallos en su contra por 62 años de cárcel. En este juicio está imputado por ser “instigador” de “amenazas coactivas agravadas por ser anónimas, por la utilización de un arma de fuego, y por tener como propósito alguna medida o concesión de un miembro del poder público en concurso ideal con daño calificado”

Este lunes comenzaron a declarar de manera testimonial, policías que participaron en los dos primeros atentados, ocurridos en la noche del 29 de mayo de 2018, en domicilios en los que habitó el juez Ismael Manfrin.

Para los fiscales que llevan adelante la causa, el líder de Los Monos empezó a planificar balaceras después de ser condenado en una primera instancia a 22 años de prisión por asociación ilícita y asesinatos ocurridos en venganza por el crimen de Claudio “Pájaro” Cantero, quien por entonces, por entonces, era el jefe de la banda.

El punto de inflexión, según la teoría que llevan adelante los acusadores, fue cuando la Justicia federal dictaminó que “Guille” Cantero debía ser trasladado de la cárcel de Piñero para ser llevado a una unidad penitenciaria federal en el marco de una causa por narcotráfico conocida como “Los Patrones”.

El 30 de mayo de 2018, un día después de los dos primeros atentados, dos de las policías que declararon trabajan en la central de emergencias 911, y que fueron quienes recibieron llamadas de personas aún no identificadas, dijeron que les exigían que “suelten a todos Los Monos porque de lo contrario los iban a matar a todos."

Otra voz aseguraba "Te estoy diciendo en serio, no jodan porque matamos a todos. Ustedes suelten a Los Monos”.