Una mujer consumió hongos alucinógenos y corrió hacía el río Paraná

Una mujer salió a correr desnuda por las calles de la localidad correntina de Ituzaingó y se metió a las aguas del río Paraná luego de consumir hongos alucinógenos.

El insólito episodio ocurrió días pasados, cuando una chica oriunda de Posadas, Misiones, corría sin ropa alguna por la vía pública y al notar la presencia policial se dirigió al sector de la playa para luego ingresar al río,.

Ante la situación, efectivos de la Policía de Corrientes con la ayuda de pescadores la rescataron y luego fue trasladada en ambulancia al hospital local.

Según manifestó la joven, horas antes había ingerido cucumelos, un tipo de hongo psicoactivo que produce alucinaciones.

Del procedimiento participaron policías mujeres, que la acompañaron en todo momento. La mujer quedó internada y se recupera favorablemente.

El cucumelo: qué es y qué reacción produce en quienes lo consumen

El cucumelo -como se lo conoce en la Argentina, Uruguay y Paraguay- contiene sustancias psicoactivas como la psilocibina, la psilocina y la baeocistina que producen una alteración mental en la persona que los consume.

Según la Global Biodiversity Information Facility, en psicopatologías como la esquizofrenia los efectos del cucumelo pueden resultar peligrosos, por lo que está contraindicado para personas con una historia familiar de esquizofrenia o psicosis.

Etimológicamente el vocablo tiene su origen en el latín cucumellum, que significa “pequeño caldero”. Es un hongo considerado cosmopolita y sus esporas germinan en el estiércol de rumiantes —vacunos y no vacunos— en lugares soleados, principalmente durante la época de lluvias.

La combinación de la fermentación y la descomposición del estiércol con las lluvias y temperaturas elevadas hace que las esporas germinen y crezca el micelio (filamentos que forman la parte vegetativa), que luego produce los hongos. El cucumelo es ilegal en la mayoría de los países del mundo.