Sofía Cáceres Sforza apuntó contra Frigerio: “Respaldó al gobierno de Milei"

Tras el inicio de las sesiones legislativas, la dirigente de izquierda criticó al gobernador de Entre Ríos: “Frigerio no se diferencia del discurso de Milei, donde frente a la crisis social, política y económica, la respuesta es aplicar medidas en donde el ajuste lo tienen que pagar los sectores más vulnerables

Mientras en la puerta del Centro Provincial de Convenciones finalizaba la movilización realizada por la asamblea contra el ajuste, el hambre y la represión, iniciaba el discurso del gobernador. Lo expresado por Frigerio solo dejó en claro el papel que tendrá la provincia con respecto a las necesidades de las políticas del gobierno nacional. El discurso de inicio de sesiones solo terminó siendo un apoyo al rumbo de ajuste que el gobierno de Javier Milei ha decidido proyectar desde el 10 de diciembre pasado.

Para Frigerio hoy estamos transitando un escenario nacional devastador, producto de años de políticas populistas, con un contexto provincial muy delicado, asimilándose así, a los diagnósticos que el gobierno nacional explica desde que asumieron y que utilizan como justificación para aplicar el programa de ajuste puesto en marcha desde el inicio del gobierno libertario. Y en relación a esto, el gobernador, en cuanto al estado de la provincia expresó que: “Recibimos una provincia desfinanciada, endeudada y sin recursos. Sin servicios de calidad y sin incentivos para producir y crecer. A esto hay que sumarle un escenario nacional muy delicado. Como dijo el presidente, sin plata”.

En función de esto, la dirigente del MST en el FIT-U, Sofía Cáceres Sforza, declaró: “Luego del discurso vemos el lineamiento que presenta el gobierno con respecto a quién tiene que pagar la crisis en esta provincia. En este sentido, Frigerio no se diferencia del discurso de Milei, donde frente a la crisis social, política y económica, que es producto de los sucesivos gobiernos de los últimos años, la respuesta es aplicar medidas en donde el ajuste lo tienen que pagar los sectores más vulnerables.”

La necesidad de un gobierno provincial austero, con municipios que recorten el gasto y el endeudamiento con instituciones financieras, son algunos de los puntos del programa de ajuste que el gobierno provincial empieza a poner en marcha. Para Frigerio estas medidas son las que permiten encontrar “los puntos de encuentro entre las necesidades del gobierno nacional y la necesidad de las provincias de contar con recursos para prestar servicios de calidad y mejorar la vida de sus habitantes.”

Claro está que estas recetas de austeridad solo se traducen en despidos masivos en el Estado provincial y a la negociación de salarios que terminan corriendo por detrás de la inflación. Estas cuestiones tienen la capacidad de materializarse en la realidad gracias a la poca resistencia sindical que hay por parte de los gremios en esta provincia, el mismo gobernador se mostró encantado por el papel dialoguista que los dirigentes gremiales tienen con él.

A tal punto que les dedicó un párrafo en su intervención: “Quiero agradecerles a los dirigentes sindicales por el trabajo y la buena predisposición que encontramos en todas las mesas de diálogos. Y espero que juntos podemos revalorizar la carrera administrativa, porque la calidad de nuestra gestión depende de los trabajadores del Estado”. Esto se suma a las declaraciones de ATE que, en el marco del brutal ajuste que sufren los trabajadores estatales, hace un “balance positivo” de la gestión de Frigerio.

Por el lado de la educación, para el gobernador es esencial el cumplimiento de los 190 días de clases, pero en ningún momento menciona la angustiante situación salarial que viven los docentes de la provincia (y que se profundizará si el gobierno nacional continúa en su posición de no transferir los fondos que le corresponden) y solo se delimita en mencionar la situación edilicia crítica en que se encuentran las escuelas de la provincia. Por supuesto que tampoco hace mención a los cientos de despidos encubiertos de trabajadores de la educación (de Centros comunitarios, del propio Consejo General de Educación) que se encontraron con que sus contratos precarizados no serían renovados y que implica un recorte brutal al acceso a la educación pública de cientos de personas.

La solución para este problema para el gobernador, no es aumentar el presupuesto en educación, sino hacer que los vecinos de la provincia seamos los que corrijamos las problemáticas de las que tiene que hacerse cargo el Estado. En contrapartida a esta área sensible como lo es la educación, el gobernador le dio un rol importantísimo a la seguridad en su discurso, en donde dejó en claro el interesante movimiento de recursos hacia este sector y jactándose que en esta provincia se encuentra la mejor policía del país. Casi ignorando el hecho en el que se encuentra envuelta esta fuerza, luego del caso de Ariel Goyeneche donde no hay ningún esclarecimiento del accionar policial.

Queda claro que, con el discurso, de más de una hora, que presentó el gobernador, esta gestión provincial se convertirá en una correa de transmisión del plan de ajuste que viene desde el gobierno nacional. Un posicionamiento que ya lo venía dejando en claro desde su asunción y que lo reafirmó a la hora de como se posicionó frente al intento de aprobación de la Ley Ómnibus. Por parte del gobierno la solución son los recortes y el ajuste, pero como lo mencionó Cáceres Sforza: “La salida podría ser, tranquilamente, el ajuste hacia los sectores que han generado esta crisis. Hubo ausentes en este discurso, como el sector del agronegocio, los sectores banqueros y los financieros, que son los verdaderos responsables de la crisis que estamos sufriendo.”

Frente a este panorama de ajuste fue necesaria la respuesta que se dio en las puertas del centro de convenciones, donde se alertó por la situación docente, de la situación estatal, de la situación de cultura, alimentaria y también, por la gran crisis ambiental y climática que estamos viviendo. Es por esto que se vuelve necesario, como lo decimos desde el MST en el FIT-U, continuar con este plan de lucha y también con la exigencia a los gremios para que encabecen esta situación y así frenar este programa de ajuste del gobierno nacional, pero también del gobierno provincial.